La Secretaría de Educación Pública (SEP) informó que a partir del primero de enero de 2011 quien incumpla los lineamientos para la venta de bebidas y alimentos dentro de las escuelas de educación básica implicará la pérdida del permiso para prestar el servicio de la tienda o cooperativa escolar.

En videoconferencia, el titular de la dependencia, Alonso Lujambio, aseguró que la penalización que podrá recibir el concesionario o responsable de la venta de alimentos en los planteles escolares será la propia pérdida de la posibilidad de continuar prestando los servicios en la escuela.

Agregó que es relevante que el proceso de aplicación de los lineamientos publicados el pasado 23 de agosto en el Diario Oficial de la Federación sea un proceso dialogado con la comunidad escolar, entre padres de familia, maestros y cuerpo directivo. Indicó que es necesario favorecer el intercambio de puntos de vista a fin de garantizar el cumplimiento puntual de los lineamientos.

Ante medios de comunicación nacionales, a quienes no se permitió el uso de la palabra, el titular de la SEP reiteró que en las próximas semanas iniciará el proceso de integración de los Consejos Escolares de Participación Social, los cuales, afirmó, podrán crear, entre otras tareas, comités que verifiquen que no se expendan alimentos y bebidas prohibidos en los lineamientos.

Uno de los comités más importantes va a ser el que dé seguimiento a los lineamientos en materia de alimentos y bebidas en las escuelas: estará integrado por padres de familia y directivos, cuya tarea será verificar que la tienda escolar efectivamente venda los productos adecuados y que excluya los que no están en los lineamientos.

Anunció que desde septiembre todas las escuelas de nivel básico convocarán a una reunión de la asamblea de la comunidad escolar, para que los padres de familia y los maestros elijan e integren el Consejo de Participación Social, que durará dos años.