El continuo deterioro de la percepción del crecimiento en Estados Unidos comienza a impactar a México y por ello se reducirá la tasa de crecimiento, estimaron analistas de los principales grupos financieros.

Durante la semana que concluyó se observó un incremento relativamente importante en las tasas de largo plazo en pesos, y el tipo de cambio trepó por encima de los 13 pesos por dólar.

Los datos en Estados Unidos siguen apuntando a una fuerte desaceleración del crecimiento. El desempleo podría repuntar y el mercado inmobiliario estaría en recesión. Aunque la situación de muchas empresas es favorable, las expectativas para el consumo y la inversión se empobrecieron.

Por lo anterior, es lógico esperar que en México también se vea una reducción en la tasa de crecimiento. El principal impulsor de la recuperación desde finales de 2009 fue el repunte del sector industrial estadunidense, comentan analistas financieros.