Querétaro, Qro., 23 de agosto. Dellonce Miles Pérez González aseguró ayer que los seis policías municipales acusados de torturarlo en 2009 siguen impunes y aún laboran en la corporación.

En conferencia de prensa, Octavio Mejía Velázquez, abogado de Pérez González, indicó que la Procuraduría General de Justicia del estado de Querétaro (PGJEQ) desechó la denuncia presentada contra los agentes, y el tribunal municipal de responsabilidad administrativas (que registra denuncias contra servidores públicos en el municipio de Querétaro) no ha emitido un dictamen al respecto.

Dellonce Miles Pérez recordó que el 26 de agosto de 2009 circulaba en su automóvil por la avenida Constituyentes de esta capital en compañía de su novia y una amiga, cuando una camioneta tipo van les cerró el paso. Del vehículo sin rótulos bajaron seis hombres vestidos de negro y con pasamontañas, quienes lo encañonaron con armas largas, lo acusaron de ser narcotraficante y se lo llevaron.

Agregó que en las instalaciones de la secretaría de seguridad pública municipal se percató de que los sujetos que lo habían capturado eran policías.

Pérez González explicó que finalmente lo dejaron en libertad y presentó una denuncia ante la PGJEQ por tortura. la acusación fue desechada por falta de pruebas, pero hace cinco días le notificaron que se le someterá a un peritaje basado en el Protocolo de Estambul, que es un manual de la Organización de Naciones Unidas para investigar y documentar tortura y otros tratos o penas crueles e inhumanos.

Sin embargo, dijo, ha estado recibiendo amenazas de muerte.

Emanuel Santos, miembro del Colectivo Contra la Tortura y la Impunidad, indicó que por conducto de esa organización no gubernamental se realizaron exámenes físicos y sicológicos a Dellonce Miles Pérez, con los cuales se comprobó que el detenido se fue sometido a tortura, principalmente sicológica, pues no se detectaron secuelas de daños físicos.