Hacia el debate
or fin, el presidente Felipe Calderón aceptó debatir sobre la despenalización de drogas, algo que desde hace más de 15 años hemos propuesto un puñado de ilusos y alrededor de lo cual poco a poco se ha construido un disperso pero constante movimiento nacional (nada que ver con los avances en otros países) en favor de la despenalización de la mariguana, en primera instancia, y en general todas las sustancias prohibidas en la actualidad.
La pregunta ahora es ¿quiénes van a debatir?, pues los actores políticos de siempre poco saben al respecto. En México existen académicos y especialistas que desde hace años han trabajado en torno al tema. Ha sido sorprendente constatar en los días pasados la cobertura que diversos medios han dado al tema. En ese panorama se inserta la aparición del número de agosto de la emblemática publicación española Cáñamo (La revista de la cultura de la cannabis) cuya portada reproduce la silueta de quien pudiera ser el Mayo Zambada, a un lado aparece la figura de la Santa Muerte y dos sicarios que disparan sus cuernos de chivo. El dossier incluye cuatro textos que comienzan con la dura crítica a la estrategia de Felipe Calderón en su lucha contra el narco.
Carta abierta
Un ejemplo de profesionistas especializados en el tema de la despenalización de las drogas es el Colectivo para una Política Integral hacia las Drogas, entre cuyos integrantes se encuentran el politólogo Jorge Hernández Tinajero, el abogado Alejandro Madrazo Lajous, el etnólogo Carlos Alberto Zamudio, el cineasta Julio Zenil, el historiador Jorge Javier Romero y la sicóloga Elsa Conde, quienes a principios de la emana pasada hicieron pública una carta abierta al presidente Felipe Calderón, en la que se señala que es indispensable dejar de prohibir la mariguana. En Estados Unidos su cultivo y venta para fines médicos ya es legal en 16 estados y posiblemente en noviembre sea plenamente legalizada para consumo lúdico en California, una de las economías más pujantes del mundo y una de las sociedades más cercanas, en geografía y cultura, a la nuestra. No tiene sentido la prohibición en México
. Estos son los interlocutores con quienes se debería realizar un verdadero debate en torno al tema.
El día del pulque
El fin de semana pasado asistimos al tercer aniversario del colectivo Pulquimia y de la apertura de La Pulkata, el expendio y galería underground más famosa de Guadalajara. Ubicada en uno de los barrios más populares de la capital tapatía (entre Arista y Eulogio Parra), en este recinto no sólo se cultiva la tradición del pulque, sino también convoca a los trovadores urbanos, artesanos huicholes y diversos artistas independientes, quienes estuvieron de acuerdo en seginar el 13 de agosto como el día del pulque con el único argumento histórico de que ese día fue conquistada la ciudad de Tenochtitlán, en el entendido de que si seguimos bebiendo pulque de alguna manera se exorcisará aquella derrota.
Otra sorpresa fue la inauguración, en pleno centro de guanatos, de La Mismísima, pulcata posmoderna de la joven empresaria Mónica Cabrera, quien decidió servir pulques de la región a ritmo de diyéi.
Reinvenciones de Daniel Lezama
Hace unos días el pintor Daniel Lezama nos mostró su más reciente producción: Cinco veces la bandera, que consiste en cinco piezas de mediano formato en las que se confirma la fuerza multisimbólica, descarnada y provocadora de este joven artista, que se encuentra en uno de los momentos más intensos de su creatividad. La obra será exhibida en Monterrey.
