El organismo financiero evaluará en Washington el impacto económico de las anegaciones
Domingo 22 de agosto de 2010, p. 20
París, 21 de agosto. El Fondo Monetario Internacional (FMI) se declaró hoy dispuesto a ayudar a Pakistán, donde millones de personas sufren
a raíz de las inundaciones, mientras las autoridades paquistaníes ordenaron el desalojo de decenas de miles de personas debido a que el río Indo desbordó a su paso por la provincia sureña de Sindh.
El FMI está con Pakistán en estos tiempos difíciles y aportará su contribución para ayudar al país
, indicó el presidente del organismo, el francés Dominique Strauss-Kahn, quien envió una carta en este sentido al mandatario paquistaní, Asif Alí Zardari.
En ese contexto, el FMI organiza una reunión en Washington para la próxima semana con representantes del gobierno paquistaní con el fin de evaluar el impacto macroeconómico de las inundaciones y las medidas que se toman para hacerle frente, y para discutir sobre los medios con que el FMI puede ayudar a Pakistán en estos tiempos difíciles
, señaló un comunicado.
La magnitud de la tragedia
tiene como consecuencia que el presupuesto del país, así como sus perspectivas macroeconómicas –respaldadas por un programa financiado por el FMI–, deban también ser revaluadas
, según Masood Ahmed, responsable de la institución financiera para la región de Medio Oriente y Asia Central.
Las inundaciones originadas por las lluvias monzónicas –las peores en el país en 80 años– han afectado a unos 20 millones de personas, arrasando con pueblos enteros, anegando tierras fértiles y dejando al menos mil 540 muertos y más de 2 mil heridos.
Por lo pronto, las autoridades ordenaron el desalojo de decenas de miles de personas a áreas seguras debido a que el río Indo desbordó a su paso por la provincia sureña de Sindh.
Unas 100 mil personas huyeron en sus automóviles, camiones, furgonetas e incluso a pie llevando las pertenencias con las que podían cargar.
De acuerdo con el administrador civil en el distrito de Shahdadkot, Yasin Shar, la fuerza del agua derribó el último muro de contención de la ciudad. Hemos evacuado a más de 90 por ciento de la población. Algunos hombres han permanecido para salvaguardar las casas de sus familias. Estamos tratando de rescatarlos
, agregó.