La decisión del gobierno federal de hacer equivalentes las normas oficiales mexicanas (NOM) con las regulaciones de Estados Unidos y Canadá facilitará la entrada al país de productos asiáticos que podrían ostentar sellos de reconocimiento internacional apócrifos, advirtieron representantes del sector laboratorios.

El presidente de la Entidad Mexicana de Acreditación, Francisco Reed Martin del Campo, dijo que actualmente muchos fabricantes de productos en Asia utilizan la triangulación para introducir sus mercancías a México luego de certificarlos en Estados Unidos y Canadá.

El problema, explicó, es que al eliminarse la obligatoriedad de certificar en el país, para las autoridades mexicanas será mucho más difícil detectar certificados reales y falsos.

En entrevista, el dirigente externó su preocupación debido a que en la Secretaría de Economía existe un profundo desconocimiento sobre el tema de la normalización y sobre lo que implica eliminar normas técnicas como si se tratara de trámites burocráticos.

La disposición, un atropello

El presidente de fomento industrial de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Juan Manuel Chaparro Romero, dijo que lo único que se está logrando con la medida es acelerar el debilitamiento de la industria manufacturera nacional, aumentar el desempleo y mermar el desarrollo de tecnología en el país.

Además, cuestionó la medida adoptada por el gobierno mexicano porque no es recíproca, y recordó que en el caso de las empresas nacionales que pretenden incursionar en los mercados estadunidense o canadiense primero deben seguir cumpliendo con las regulaciones de esos países.

Si ese mismo producto lo venden a Pemex o a CFE tienen que cumplir, además, con las normas de referencia de estas empresas. Para exportar deben cumplir con la norma ANSI estadunidense o la CSI de Canadá. Todo un vía crucis para un producto hecho en México. ¿Qué pyme mexicana puede hacer algo similar para hacer llegar su producto a otro país?, cuestionó.

El director del Consejo Mexicano de Normalización y Evaluación de la Conformidad (Comenor), Rodrigo Alegría, consideró el anuncio hecho este martes por el titular del Ejecutivo como un atropello, y dijo que evidentemente el gobierno federal ha tratado de operar a toda marcha y con toda la fuerza del Estado para hacer que las voluntades sean a favor de la medida.