La propuesta del ministro Sergio Valls de emitir un voto de censura contra el cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, quien acusó a los integrantes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de corruptos y de haber sido maiceados por el jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, para aprobar que los matrimonios gays puedan adoptar, tomó por sorpresa a sus 10 compañeros en la sesión pública del pasado lunes.

Comentaron lo anterior fuentes judiciales; destacaron que el ministro presidente de la SCJN, Guillermo I. Ortiz Mayagoitia, actuó rápidamente al exhortar a los otros integrantes del pleno para que respaldaran la postura asumida a título personal por Valls.

Sin embargo, trascendió que una vez que el pasado lunes el máximo tribunal fijó una postura institucional de rechazo a las palabras del jerarca católico, no hay consenso entre los ministros sobre el siguiente paso.

De acuerdo con funcionarios consultados, una vez que el pleno hizo pública su censura por unanimidad, hay quienes consideran que Ortiz Mayagoitia está obligado a actuar en consecuencia y mandar a la Secretaría de Gobernación un oficio en el que le solicite que proceda en consecuencia.

Explicaron que la dependencia encabezada por Francisco Blake Mora es la encargada de dar seguimiento a las relaciones entre los poderes de la Unión, además de que tiene bajo su jurisdicción la relación con las agrupaciones religiosas.

Los funcionarios aseguraron que Sandoval Íñiguez podría ser objeto de alguna sanción legal, ya que sin pruebas acusó de corrupción a los 11 integrantes del máximo tribunal.

En caso de que Ortiz Mayagoitia evada su responsabilidad –indicaron–, no se descarta que Valls pudiera interponer una demanda civil contra el cardenal de Guadalajara por hacer acusaciones sin fundamento y por dañar su imagen pública al tacharlo de corrupto, al igual que a los otros ministros.

Todo dependerá de la forma en que se desarrollen las cosas, aseguraron.

En contraparte, hay ministros que piensan que la decisión del pleno de respaldar la moción de Valls fue la adecuada, que con el voto de censura, la Corte respondió sin estridenciasa los infundios del prelado.

Y que sobre todo, la respuesta del pleno fue contundente en los hechos, al aprobar por mayoría (salvo el voto en contra de Sergio Aguirre y Ortiz Mayagoitia) que las parejas gays puedan adoptar menores.

En su opinión, que parece ser la que prevalecerá, la Corte no debe prestarse a dimes y diretes ni llevar a los tribunales un asunto de este tipo.

Tampoco se inclinaron porque los ministros, de manera individual, acudan a los tribunales para exigir a Sandoval que presente pruebas de sus acusaciones o, de lo contrario, que sea sancionado conforme a la ley.

De cualquier manera, los entrevistados dejaron en claro que el voto de censura fue una acción histórica y necesaria del máximo tribunal, para salir al paso a acusaciones falsas que merecían una respuesta contundente.