El secretario general de la Corte Interamericana de Arbitraje y Conciliación Ambiental, Ramón Ojeda Mestre, reconoció que el organismo que dirige no es un tribunal internacional, sino una instancia con reconocimiento académico, por lo que su intervención en el caso de la supervía poniente no tiene carácter vinculatorio, a menos de que las partes involucradas aceptan la conciliación.

Ojeda Mestre aceptó haber colaborado en la administración del ex regente de la ciudad Manuel Camacho Solís, quien lo designó delegado en Magdalena Contreras; sin embargo, comentó que no fue durante su gestión cuando se presentó el proyecto vial que ahora se conoce como supervía poniente.

Manifestó que el organismo del cual es secretario general fue constituido legalmente y asentado en el Registro Público de la Propiedad y del Comercio, y la intervención de éste en asuntos públicos lo pueden solicitar asociaciones de todo tipo.

Ante el desconocimiento que algunos vecinos han manifestado en torno de su organización, Ojeda Mestre comentó que es natural; sin embargo, dijo que ya se está trabajando e informó que aceptaron participar en el análisis los especialistas de Francia, Michael Prieur, y el de Alemania, Eckard Rechbinder.

Ramón Ojeda dijo que ambos expertos emitirán la opinión, pues ya recibieron mayor información del proyecto de la supervía.

También aseguró que el Gobierno del Distrito Federal ya fue notificado y el contacto con las autoridades es mediante el subsecretario de Coordinación Metropolitana y Enlace Gubernamental, Héctor Hernández Llamas, con quien, dijo, también trabajó durante la regencia de Camacho Solís. Ayer por la tarde Hernández Llamas y Ojeda Mestre sostuvieron una mesa de trabajo.

Por su parte, el presidente del Partido Acción Nacional (PAN) en el Distrito Federal, Obdulio Ávila Mayo, reconoció que podría ser rechazada la petición de que el organismo que dirige Ojeda Mestre haga las veces de árbitro entre el gobierno capitalino y opositores a la vialidad de cuota.

El plazo para que las autoridades determinaran si aceptaban la conciliación finalizó ayer por la noche.

Obdulio Ávila reconoció que a pesar de que los diputados locales de Acción Nacional han presentado puntos de acuerdos ante la Asamblea Legislativa con respecto a la supervía, ninguno se ha referido a la contradicción que existe entre la declaratoria de la barranca de Tarango como área de valor ambiental y el trazo de la vialidad de cuota dado a conocer por la Secretaría de Obras y Servicios, pues el primero autoriza la construcción de un tendido aéreo de dos carriles por sentido y el segundo refiere una vialidad a nivel superficial con seis carriles en total.

Sin embargo, Ávila Mayo dijo que ha instruido a los legisladores locales a señalar que las obras públicas son necesarias en el Distrito Federal, pero es prioritario mitigar al mínimo el impacto ambiental y que los proyectos que se desarrollen sean con el concurso de la ciudadanía, además de que haya transparencia plena.