Los legisladores perredistas Aleida Alavez Ruiz, Alejandro Sánchez Camacho y Maximiliano Reyes Zúñiga pidieron la renuncia de los secretarios de Educación Pública y Salud federales, Alonso Lujambio y José Ángel Córdova, respectivamente, por considerar que al no prohibir alimentos chatarra en las escuelas de nivel básico cometen infanticidio contra los niños mexicanos.

El vocero del grupo parlamentario del PRD en la ALDF, Alejandro Sánchez Camacho, comentó que con base en las leyes generales de Salud y del Consumidor, así como en la de Responsabilidades de Servidores Públicos, analizarán si Alonso Lujambio o Córdova Villalobos incurrieron en algún delito por negligencia al permitir que sigan la venta de alimentos chatarra en las escuelas.

En conferencia de prensa anunciaron que el área jurídica del grupo parlamentario del PRD analiza promover acciones contra los citados funcionarios federales, como la controversia constitucional o amparos contra esta decisión arbitraria que atenta contra la salud pública de los infantes del país.

En caso de no tener respuestas en esas instancias podrían acudir a organismos internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, pues es clara la violación del derecho a la salud que se comete contra las niñas y niños mexicanos.

Anunciaron que la próxima semana comenzarán una campaña masiva promovida por la propia ALDF, así como por las secretarías de Educación y Salud locales, en todos los espacios públicos, desde parques y centro de recreación hasta las unidades de servicios médicos del GDF, con el propósito de informar a niños y padres de familia sobre los malos hábitos alimentarios y promover la sana nutrición.

Alavez Ruiz afirmó que la ALDF hace una enérgica solicitud a que se reconsidere la prohibición de la venta de comida chatarra en las escuelas de la ciudad de México, al tiempo que señaló que en ese órgano legislativo valoran la decisión de las autoridades federales como equívoca, ya que México ocupa el segundo lugar mundial en obesidad infantil.

Rechazó el argumento de la SEP y Salud de que la determinación se justificaba por el consumo de calorías necesarias para los infantes, sometiéndolos a la ingesta de estos alimentos, lo que ha colaborado para que 40 por ciento de la población padezca de sobrepeso.

Recordó que la obesidad genera los problemas de salud que más atiende el sector médico, como hipertensión, diabetes o altos índices de colesterol, triglicéridos y ácido úrico.