Domingo 15 de agosto de 2010, p. a20
Un intercambio de correspondencia electrónica dio origen a este volumen en el cual Michel Houellebecq y Bernard-Henri Lévy, seres irreconciliables, propiciaron una novedad editorial. Dos personajes contrastantes, escriben a cuatro manos: una mezla de confesiones, declaraciones de principios, memorias intelectuales y emociones personales.
Son diferentes: uno es novelista misántropo, depresivo, autoexiliado en Irlanda, aburrido y asqueado de las polémicas mediáticas que él mismo propició sobre literatura, religión, educación y política. El otro es un filósofo comprometido y erudito. Ambos confluyen en una idea: encontrar un lugar habitable para un escritor cuya obsesión no sea estar en el top ten más vendidos.
Las cartas escritas entre enero y julio de 2008 se caracterizan por su contenido áspero, con réplicas y respuestas muy brillantes.
Entre los textos sobresalen confesiones: Pertenezco a una familia en que el pudor, la aversión al énfasis, el repudio de todo lo que pudiera parecerse a un desbordamiento sentimental o de la indiscreción estaban elevados al rango de imperativos
escribió Bernard-Henri Lévy. Pero, en el inicio del intercambio, Houellebecq señala la principal convergencia entre ambos: todo, como se suele decir, nos separa, excepto un punto fundamental: tanto usted como yo somos individuos bastantes despreciables
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Título: Enemigos públicos
Autores: Michel Houellebecq y Bernard Henri-Lévy
Traducción: Jaime Zulaika
Editorial: Anagrama
Número de páginas: 311
Precio de lista: 510 pesos