La fiesta no fue completa, el gol en tiempo de compensación de Silva apagó la euforia
El Chicharito Hernández se encargó de abrir el marcador
Los cambios hispanos fueron más redituables
Por cortesía, los tricolores cedieron el trofeo del Bicentenario a los visitantes
Jueves 12 de agosto de 2010, p. a16
Pese a todos los inconvenientes, la aduana del estadio Azteca no paró al campeón del mundo. Y con el empate a un gol, el Tricolor le cedió a España, por cortesía, el trofeo Bicentenario que estaba en juego.
Con el corazón algo apagado terminaron los aficionados mexicanos, quienes abarrotaron ayer el coloso de Santa Ursula, porque el tanto de los españoles cayó en tiempo de compensación y se perdió la posibilidad de la celebración.
En la distribución de los roles en esta fiesta, el monarca salió queriendo dirigir la orquesta. Sin embargo, mostró que apenas traía gas para tocar lateralmente el balón, sin profundizar, pese a que a la hora del arranque del juego –a las 15 horas–, el sol se había ocultado.
Durante los primeros 10 minutos del encuentro amistoso, el representativo mexicano observó prácticamente cómo la visita monopolizaba el balón, mientras el público empezó a exigir algo más.
Y no tardó en reaccionar. Al minuto 12, Gerardo Torrado mandó un pase casi a tres cuartos de cancha; Carlos Vela se dio cuenta que estaba en fuera de lugar y no hizo nada por el balón, se lo dejó a Javier Hernández, quien se escapó y venció al portero Iker Casillas con un derechazo. Con el 1-0 hasta los olés aparecieron en la tribuna.
El Chicharito tuvo oportunidad de enloquecer nuevamente a los aficionados, pero el rival alcanzó a rechazar su remate en el área, al 18.
Once minutos después los españoles por poco siembran el desaliento en el Azteca. Luego de que una confusión entre Carlos Salcido y Héctor Moreno provocó un tiro de esquina, vino un disparo lejano de Santiago Cazorla que se estrelló en el travesaño de la meta defendida por Guillermo Ochoa.
Pero el Tri concluyó mejor la primera parte con un tiro de Rafael Márquez desde fuera del área, que desvió Casillas, y un remate fallido de Vela, cuando se le venía encima el arquero hispano.
En el complemento empezaron los cambios y los de España fueron más redituables. Como es su costumbre, buscaba no prestar el balón al rival, aunque fue hasta el final cuando apareció con verdadero peligro en el campo del anfitrión.
Pedro se animó a disparar desde fuera del área, al 86, y el portero local Jesús Corona pudo quedarse con la pelota. Al 89, nuevamente Pedro estuvo cerca de anotar, pero su remate salió a un lado de la meta.
Y sobre la hora, Xavi perfiló por el centro del área a David Silva y éste no dudó en fusilar al guardameta del Cruz Azul, para el 1-1.
De las manos se escapó la victoria. Y pudo ser peor, porque Silva todavía tuvo otra oportunidad, pero cruzó demasiado su disparo.
Cuando el árbitro dio el silbatazo final, el público lo acompañó con un abucheo.
El jefe del Ejecutivo, Felipe Calderón, acudió al Azteca a presenciar el partido acompañado de su familia.
La Presidencia de la República no emitió un comunicado al respecto. Sólo confirmó la asistencia del primer mandatario para disfrutar del encuentro.
El partido amistoso forma parte de los festejos del bicentenario de la Independencia de México y el centenario de la Revolución.
Con información de Fabiola Martínez