A partir de hoy entran en vigor las reformas al artículo 23 del Reglamento de Tránsito Metropolitano que recrudecen las sanciones contra conductores de vehículos de transporte público, incluidos los taxis, que circulen con vidrios polarizados, oscurecidos o aditamentos como parasol, quienes además de pagar una multa de 10 salarios mínimos, 574 pesos, su unidad será trasladada al depósito de vehículos.

La medida, señalaron autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF), tiene como propósito evitar los asaltos a los usuarios de esta unidades, y permitirá a la policía poder verificar si en el interior de ésta se comete algún ilícito.

En las modificaciones, publicadas en la Gaceta Oficial del Distrito Federal, se señalan multas para los conductores de transporte público que circulen por el segundo carril de la vía lateral salvo que se utilice para rebasar.

El artículo 23 del reglamento señala multas de entre 10 y 80 salarios mínimos para los conductores que cometan diversas faltas como realizar maniobras de descenso o ascenso de pasajeros en segundo o tercer carril; llevar o utilizar televisores; rebasar en el carril de contraflujo de los ejes viales, y cargar combustible con pasajeros a bordo, entre otras.

Al respecto, la SSP-DF señaló que se prepara un operativo para garantizar que los conductores de estas unidades, tanto microbuses como taxis, cumplan con las disposiciones estipuladas en el citado artículo del reglamento.

Según las estadísticas de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, hasta el primer semestre del año se habían denunciado dos mil 16 asaltos en microbuses y taxis, principalmente en las delegaciones Gustavo A. Madero e Iztapalapa.