En los poco más de tres años y medio de gobierno del presidente Felipe Calderón la industria de la construcción reporta casi dos años de caída libre, con la consecuente pérdida de empleos y un escaso aporte a la recuperación económica.

No está siendo el sexenio de la infraestructura, aseveró el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), José Eduardo Correa Abreu, en alusión a que Calderón, cuando fue candidato a la Presidencia, prometió que el sector jugaría un papel central en el impulso económico.

Hasta mayo de este año las 16 dependencias gubernamentales que mayor presupuesto recibieron para inversión física (erogaciones que se destinan a construcción y/o conservación de obra pública, así como a la adquisición de maquinaria y equipo necesario para llevar a cabo obras) tenían un rezago de 47 mil 253 millones de pesos.

El dirigente de la CMIC argumenta que de agosto de 2008 a mayo pasado la industria lleva 22 meses consecutivos de caída libre y su recuperación no se ha observado como en otros sectores económicos, por ejemplo el automotriz y el exportador.

Subrayó que la industria automotriz ha logrado cierta recuperación debido a los incentivos del gobierno federal, entre los cuales destaca la eliminación del pago de tenencia para quien adquiera vehículos nuevos.

De acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda y del Instituto Nacional de Geografía y Estadística, en 2009 esta industria cayó 7.5 por ciento, aún más que el producto interno bruto del país, y al cierre de abril reporta una contracción de 1.4 por ciento.

Por ende, no está siendo el sexenio de la infraestructura, expresó Correa en entrevista.

Aseguró que el sector debería crecer a un ritmo superior a 17 por ciento para recuperar los casi dos años de desplome, y destacó que ello no sucederá aunque se apliquen todos los recursos para infraestructura asignados para este año.

Respecto del subejercicio en que ha incurrido el gobierno federal, el dirigente sostuvo que es algo real, por mucho que se quiera decir que no.

Explicó que a estas alturas del año el avance en la aplicación de los 418 mil millones de pesos que el Congreso aprobó para proyectos de infraestructura en las dependencias federales más importantes debería ser de entre 48 y 52 por ciento.

Por desagracia no llevamos más que entre 15 y 18 por ciento de ese monto, incluyendo lo concursado y contratado; entonces, el subejercicio es de al menos 30 por ciento, apuntó.

Según el último reporte de la CMIC sobre la inversión física ejercida por el sector público, hasta el quinto mes de 2010 Telecom Telégrafos y la Secretaría de Energía no habían gastado ni un peso.

Aeropuertos y Servicios Auxiliares, la Secretaría de Seguridad Pública, la Conagua, el Fonatur y Capufe llevaban avances de entre 7.4 y 13.3 por ciento.

Únicamente el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado tenía un avance mayor a 50 por ciento (54.9 puntos porcentuales).

Correa Abreu enfatizó que México carece de proyectos de largo plazo, pues el país, añadió, no se planea cada tres ni cada seis años, sino cada 12 meses, y responsabilizó a la burocracia federal del subejercicio de fondos.

La industria de la construcción genera 4 mil 700 empleos al año y expande su influencia a 37 ramas económicas. Además, 22 por ciento de puestos de trabajo registrados en el Seguro Social pertenecen al sector.

Apenas en abril pasado, durante la toma de protesta del nuevo comité ejecutivo de la CMIC, Calderón Hinojosa reiteró su compromiso con la industria de la construcción.

Antes de que tomara posesión como Presidente, siendo mandatario electo, aseguré a ustedes que este sería el sexenio de la infraestructura, y, en efecto, está siendo el sexenio de la infraestructura, declaró el titular del Ejecutivo hace tres meses.