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Se impuso a los Gladiadores, que fallaron muchas oportunidades de anotación

Puebla aprovechó dos aciertos para obtener su primera victoria en el torneo

Chelís rechazó comentar si fue merecido el triunfo; el equipo caminó, valen mucho los tres puntos

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El camotero Mario Ortiz (derecha) puso en aprietos a la zaga potosina comandada por Aníbal MatellánFoto José Castañares/La Jornada de Oriente
 
Periódico La Jornada
Lunes 2 de agosto de 2010, p. 5

Puebla, 1° de agosto. Dos aciertos bastaron a Puebla para conseguir su primera victoria del torneo y dar cuenta 2-1 de un San Luis que falló muchas oportunidades de anotación, en partido de la fecha dos del torneo Apertura 2010, disputado en el estadio Cuauhtémoc.

Los goles de los Camoteros fueron del uruguayo Nicolás Olivera, apenas a los 18 segundos, y del argentino Gabriel Pereyra (46). Édgar Castillo descontó al 64.

Con este resultado, el conjunto de la franja llegó a cuatro puntos, en el tercer sitio del grupo tres, mientras los Gladiadores se quedaron con uno en el segundo pelotón.

Puebla resolvió el partido en el primer minuto del lapso inicial y en el último suspiro del mismo, ya que sin ser dominador, y menos espectacular, logró una ventaja que nunca perdió, además de que se vio beneficiado de las constantes fallas de los delanteros visitantes ante el marco de Alexandro Álvarez.

Apenas corrían los primeros segundos del cotejo cuando Joel González envió un servicio filtrado a la derecha a Mario Ortiz, quien mandó un disparo cruzado que se estrelló en el poste contrario y el esférico le quedó a Olivera, quien de frente disparó con potencia para empujarlo al fondo de las redes.

La defensa del cuadro potosino siguió dormida y Olivera tuvo dos oportunidades más de ampliar el marcador. La más clara fue al minuto 11, cuando punteó el balón dentro del área, pero el arquero Carlos Trejo desvió con un manotazo.

Entonces despertó San Luis y se acercó en un sombrerito y tiro de volea de Jaime Correa que el Mostro Álvarez detuvo en buen lance y luego en un tiro-centro de Daniel Alcántar, que pasó a todos y se estrelló en el poste derecho.

Los Gladiadores tuvieron en su mejor elemento en el ecuatoriano Michael Arroyo, quien se dio gusto desbordando a la zaga camotera, pero no pudo dar el pase preciso para convertir.

El equipo de Ignacio Ambriz tuvo un amplio control de la pelota y creó múltiples acciones de gol. Las más claras fueron al final del primer periodo, pero Arroyo, el peruano Wilmer Aguirre y el venezolano César González anduvieron sin puntería.

En la compensación Puebla se encontró sin merecerlo con el 2-0, en una brillante acción de Gabriel Pereyra. A la entrada del área, por el lado izquierdo y bajo la presión de dos defensas, el argentino disparó bombeado y Trejo alcanzó a tocar el balón pero no pudo evitar la anotación. Pereyra festejó al ponerse la máscara del Místico y se ganó la tarjeta amarilla.

Para el complemento, Ambriz trató de dar más profundidad a su escuadra con el ingreso, al 57, de Édgar Castillo.

Los tuneros siguieron con el esférico, pero también con los yerros. Al minuto 64 Aguirre falló una clara oportunidad cuando estaba sin marca cerca del área chica, al mandar un cabezazo sin fuerza ni colocación a las manos de Álvarez.

El Gringo Castillo le respondió a su técnico y acortó a 1-2 al 65, cuando desde fuera del área disparó colocado a la derecha del Mostro, quien se quedó estático.

El Chelís movió a su escuadra con el ingreso de Gerardo Lugo por el también ex cruzazulino Mario Ortiz.

El ecuatoriano Arroyo, el mejor hombre de los Gladiadores, realizó una buena incursión por el centro, pero su disparo fue detenido por Álvarez con el pie izquierdo e impidió el empate.

Después los equipos se nulificaron en una lucha intrascendente en la media cancha y ya en tiempo de compensación Aguirre volvió a fallar al mandar el balón a las tribunas cuando enfrentó sin marca al portero Álvarez.

El duelo finalizó con empujones luego de unos manotazos entre Alcántar y Felipe Ayala.

El técnico Sánchez Solá rechazó hablar sobre si merecieron la victoria y sólo destacó el valor del triunfo: “No quiero poner en tela de juicio si nos merecemos o no el triunfo, pero el equipo caminó y es mucho el valor de los tres puntos.

Nos tenemos que ir acostumbrando a ganar, y más ante un grandísimo rival, es un equipazo este San Luis, dijo y explicó el gol tempranero.

“Era una estrategia salir a taparles ‘con un sistema huracán’ para que el rival supiera que esto es Puebla. Entonces tuvimos por añadidura un gol al primer minuto, la anotación tiene muchas lecturas y cada quien que le dé la suya”, señaló.

Puebla viajó la noche del domingo a Boston, donde enfrentará este miércoles a New England en la semifinal del Superliga.