Phoenix, 29 de julio. Arizona presentó este jueves una apelación para revocar el fallo de una juez estadunidense que bloqueó partes clave de la polémica ley del estado contra la inmigración ilegal (SB 1070), dijo la oficina de prensa de la gobernadora Jan Brewer.

Abogados de la mandataria y de Arizona solicitaron a la corte de apelaciones del noveno circuito en San Francisco, que revoque un mandato judicial preliminar que prohíbe partes de la ley, además de una consideración expedita para la apelación del estado.

La juez de distrito Susan Bolton bloqueó el pasado miércoles los elementos más controversiales de la ley Arizona, que habían generado tanto apoyo como repudio en el estado que limita con México.

Hoy presenté una apelación expedita al noveno circuito pidiendo a la corte que levante el bloqueo interpuesto por la jueza Bolton contra ciertas previsiones de la ley SB 1070, y para permitir que esas previsiones entren en efecto a la espera de una decisión sobre los méritos de este caso, dijo Brewer en un comunicado.

También he pedido al noveno circuito que acelere el proceso de los informes y su dictamen, ya que el Congreso y el presidente (Barack Obama) una vez más no actuaron, añadió.

La legislatura de Arizona, controlada por integrantes del Partido Republicano, aprobó la ley en abril para intentar que alrededor de un millón de inmigrantes indocumentados abandonen el estado y detener el tráfico de personas y drogas a lo largo de la frontera con México.

Las tensiones sobre la llamada ley Arizona han encendido el debate nacional sobre la inmigración y promete ser un tema importante en las elecciones de noviembre, en las que los demócratas del presidente Barack Obama lucharán por retener el control del Congreso.

Hay alrededor de 10.8 millones de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos, un país de más de 300 millones de habitantes.

Finalmente se informó que la policía arrestó al menos a 30 manifestantes que salieron a las calles de Phoenix este jueves para protestar contra la ley, aunque sus previsiones más polémicas ya habían sido bloqueadas por Bolton.