Juicio en tribunales de Mendoza contra responsables de crímenes de lesa humanidad
Viernes 30 de julio de 2010, p. 27
Buenos Aires, 29 de julio. Un ex militar y actual policía confesó que fue instruido por militares de Estados Unidos en contrainsurgencia con técnicas de interrogatorios
, es decir, torturas, en cursos que dictaron en este país.
En el contexto del juicio en tribunales de San Rafael, Mendoza, contra responsables de crímenes de lesa humanidad en esa provincia del noroeste, el ex militar Roberto Reyes conmocionó al tribunal y a familiares de las víctimas con esta confesión.
Es la primera vez que se hace un relato tan amplio sobre los métodos de torturas aplicados y sobre la participación de asesores estadunidenses que habían actuado en Vietnam
.
En el curso en 1967 que dictaron 20 rangers estadunidenses en Tartagal, provincia de Salta, dijo que les entregaron manuales y procedimientos para aplicar estos temibles métodos a detenidos, con la intención de obtener información rápida y llegar a otros militantes o sospechosos, relató Reyes.
El ex militar sostuvo que los asesores afirmaron que las torturas debían hacer que sus detenidos les pidieran la muerte.
El curso antiguerrilla
tuvo una duración de cuatro meses en en 1967, “cuando el Che Guevara estaba en Bolivia”, dijo Reyes.
Entonces gobernaba aquí el dictador Juan Carlos Onganía, quien tenía relaciones muy estrechas e intercambios con el dictador boliviano René Barrientos.
Participaron en los cursos 200 oficiales y suboficiales del ejército, que llegaron desde distintos lugares del país. Hice un curso antiguerrilla en Tartagal, en 1967, con los yanquis. Allí yo aprendí a matar. Nos enseñaron técnicas de interrogatorio mediante tortura y cómo se debía torturar
, sostuvo.
El relato conmocionó a los familiares cuando dijo que les enseñaban, por ejemplo, a azotar a los prisioneros con correas mojadas y, a medida que se secaban, cortarles los párpados; llegado el momento, se volvían locos porque no podían cerrar los ojos, les tiraban sal y estaban al rayo del sol
También dio detalles del llamado submarino
(hundir la cabeza en agua hasta la asfixia) o cómo colgar a prisioneros de las manos hasta que llegado el momento se descoyuntaban
.
Señaló que varias de estas técnicas ya eran conocidas aquí y que en algunos casos los veteranos estadunidenses terminaron aprendiendo de nosotros
.
Reyes, dado de baja del ejército por un accidente, ingresó la policía cuando se produjo el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976. Estaba asignado a la Casa Departamental de San Rafael, donde funcionó un centro clandestino de detención, por lo cuál fue citado como testigo.
Reconoció haber visto a los militares imputados en ese lugar, pero aseguró que no presenció torturas. Admitió que en el lugar había detenidos encerrados en celdas sin luz ni comunicación.
Los abogados de las víctimas de la dictadura dijeron que se documenta que hubo un plan sistemático de terrorismo de Estado, que se comenzó a preparar en los años 60 para ponerlo en marcha en los años 70
.
En este juicio están siendo juzgados Raúl Alberto Ruiz Soppe, ex jefe de la segunda unidad regional de la policía de Mendoza; el teniente del ejército Aníbal Alberto Guevara, enlace entre la policía y los mandos militares, y otros uniformados.