El director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), José Luis Luege Tamargo, aseguró que, debido a la llegada de la temporada de calor en el noreste del país, el río Bravo está bajo control.

En conferencia de prensa, junto con el subdirector técnico de la Conagua, Felipe Arreguín Cortés, y el coordinador del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), Adrián Vázquez Gálvez, el funcionario afirmó que según los pronósticos meteorológicos del 17 al 23 julio disminuirán las lluvias en la región noreste del país, lo cual permitirá bajar los niveles de almacenamiento de las presas, cuya capacidad está rebasada.

La emergencia meteorológica pasó, tenemos un espacio precioso de seca que está asociado al fenómeno conocido como la canícula, que es temperatura muy alta y lluvias escasas. Esto nos va a dar el espacio exacto para la operación de las presas y para bajarlas a un nivel que nos permita capacidad de almacenamiento frente a los siguientes fenómenos hidrometeorológicos que vendrán.

Informó que todas las presas del norte y noreste del país se encuentran en este momento con un nivel de almacenamiento por encima de su capacidad máxima; sin embargo, aprovechando este periodo de seca, se realizarán operaciones para que, en un mes y medio, queden a 80 por ciento de su capacidad.

Explicó que para evitar inundaciones, tras incrementarse el desfogue de la presa binacional El Falcón de mil 125 metros cúbicos por segundo a mil 700 metros cúbicos por segundo, la Conagua cerro la presa El Cuchillo y disminuyó la extracción de agua en la Marte R. Gómez que ahora descarga sólo 588 metros cúbicos por segundo.

Asimismo ha seguido disminuyendo la extracción de agua en la presa Venustiano Carranza, la cual se desfoga en estos momentos a 632 metros cúbicos por segundo.

Sostuvo que estas maniobras técnicas en el manejo de presas no han provocado inundaciones en Reynosa; sin embargo, hubo inundaciones en 12 colonias, por estar ubicadas dentro de los cauce del río.

Luege Tamargo responsabilizó a las autoridades municipales de las irregularidades en el ordenamiento territorial y sostuvo que asentamientos de este tipo en zonas de alto riesgo responden a vicios políticos del pasado.

Esos líderes han llevado ahí a la gente y han cobrado por los predios y eso ha sido en colusión, muchas veces, con autoridades municipales. La denuncia es que dejemos atrás ese vicio del pasado, ese clientelismo político y esa corrupción.

Por otro lado, y en respuesta a dirigentes del PRI que habían acusado a la Conagua de escatimar recursos para atender la emergencia, Luege Tamargo rechazó esas afirmaciones y las calificó de oportunismo político ruin.

Aseguró que la Conagua actuó en tiempo y forma ante la situación de emergencia y liberó automáticamente recursos del Fonden, mediante el programa de Apoyos Parciales Inmediatos (Apin), por 161.4 millones de pesos para la atención de emergencia en los estados afectados.