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Considera que el mandatario no tiene autoridad moral para convocar a crear un frente

El Presidente, avalado por la cúpula del PRI, ha llevado al país al borde del colapso, dice Bartlett
 
Periódico La Jornada
Miércoles 30 de junio de 2010, p. 13

El ex secretario de Gobernación, Manuel Bartlett Díaz, advirtió que el país está muy cerca del colapso, debido a la incapacidad de Felipe Calderón para frenar la inseguridad y el avance del narcotráfico, y por su sujeción a las decisiones de Estados Unidos. Es un gobierno perdido, que no sabe qué hacer.

A su juicio, la cúpula del PRI es corresponsable de la situación a la que Calderón ha llevado al país, ya que han gobernado juntos y en lugar de actuar como oposición, han permitido la misma política económica que empobrece a las mayorías y una estrategia fallida para combatir al crimen organizado.

Bartlett dijo que tanto la dirigente nacional priísta, Beatriz Paredes, como los coordinadores parlamentarios en ambas cámaras, Manlio Fabio Beltrones y Francisco Rojas, y ahora el nuevo líder carismático, Emilio Gamboa, son responsables de la política económica, al avalar en las cámaras reformas legales contrarias al interés de los mexicanos.

Secretario de Gobernación en el sexenio de Miguel de la Madrid, consideró que Calderón no tiene autoridad moral para convocar a nadie, ya que en lo que va de su gobierno se ha dedicado a violar una y otra vez la Constitución.

Ahora finge que hará un análisis general de la política en contra de la delincuencia organizada, cuando no ha hecho nada en tres años. No hará nada, dará mensajes en televisión, vía cadena nacional, y seguirá pensando que gobierna, pero la realidad está tronando.

Expuso que es un hecho gravísimo el asesinato del candidato el PRI a la gubernatura de Tamaulipas, que era prácticamente el ganador de la contienda, pero lo eliminan días antes de la elección. A ello se suman, dijo, los asesinatos de jóvenes en Ciudad Juárez y las ejecuciones en varias entidades de la República.

Expertos de México y del extranjero han insistido en que se requiere otra estrategia anticrimen y en materia económica, pero Calderón insiste en su guerra contra el narco, enfrentar la violencia con más violencia, sin sistemas de inteligencia, sin atacar el lavado de dinero, ni dar oportunidades de empleo a los jóvenes.

Bartlett hizo notar que mientras el presidente Obama cambia la estrategia antinarcóticos en Estados Unidos y pone énfasis en evitar el consumo de drogas entre su población, el embajador de ese país le recomienda a Calderón que aquí continúe la misma lucha y entonces nos tenemos que matar entre nosotros, ya que siguen llegando armas y dinero sucio al país.