Querétaro, Qro., 29 de junio. Unas 250 personas se manifestaron en los terrenos donde se instala una planta estadunidense procesadora de antimonio, con aval de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). Exigen que las instalaciones no operen.

Los inconformes consideran que la empresa afectará al medio ambiente, así como el comercio y el turismo que llega a la zona, por su cercanía a la Peña de Bernal, y a capillas otomí-chichimecas recientemente nombradas por la UNESCO patrimonio inmaterial de la humanidad.

El presidente del patronato de cultura y de turismo de Bernal, Edgardo Cabrera, lamentó que se instale una factoría en una región aledaña a las 289 hectáreas de área natural protegida de la Peña de Bernal (el tercer monolito más grande del mundo, de 288 metros de altura), enclavado en la comunidad del mismo nombre, en el municipio de Ezequiel Montes, catalogada como pueblo mágico por la Secretaría de Turismo federal, y las 200 capillas otomí-chichimecas ubicadas en el municipio de Tolimán.

Las capillas son centros de oración y de culto a personas que han fallecido, erigidas dentro de viviendas en San Antonio de la Cal, municipio de Tolimán.

Durante la manifestación, a la que acudieron pobladores de Ezequiel Montes y Tolimán, estuvo presente el apoderado legal de la empresa US Antimony, Leo Jackson, quien intentó, sin éxito, convencer a los inconformes de que la planta no contaminará.

Los manifestantes caminaron por la carretera que conecta a Bernal con la Sierra Gorda de Querétaro, hasta los terrenos donde se construye la procesadora de antimonio, donde dialogaron con Jackson.

El apoderado de US Antimony dijo a los lugareños que cuentan con información errónea, pues la Semarnat realizó estudios de impacto ambiental y en ninguno se indica que la planta emitirá contaminantes al aire o al agua.

Los lugareños dijeron desconfiar de que sea cierto que la planta no contaminará. Citaron por ejemplo a la empresa elaboradora de cal Los Arcos, ubicada a unos metros del sitio donde se instala la planta de antimonio, la cual emite altos niveles de contaminación.

Jackson anunció que apelará de una decisión del juzgado cuarto de distrito federal, el cual negó un amparo que solicitó para que se instalara la planta de antimonio, porque oficialmente no fue notificado de esa resolución, y mientras se soluciona la situación jurídica continúa la construcción de la planta, que lleva un 75 por ciento de avance.

Los promotores de la planta de antimonio intentaron instalarla en los municipios de Cadereyta y Tolimán, mas fracasaron ante el rechazo de los habitantes, e insisten ahora en San Antonio de la Cal.