El Partido Revolucionario Institucional (PRI) presentó una iniciativa de reforma al reglamento interno del Congreso por la que se otorgaría facultad exclusiva a la Cámara de Diputados para ratificar cualquier disolución, liquidación, extinción o fusión de cualquier organismo descentralizado. De aprobarse tal cambio no se repetiría el cierre abrupto de empresas como Luz y Fuerza del Centro.

Canek Vázquez, legislador priísta, calificó de facilismo autoritario la decisión del Ejecutivo federal en torno a Luz y Fuerza del Centro.

Proponemos, asimismo, que la creación de cualquier organismo descentralizado derive necesariamente de un decreto del Congreso de la Unión y del Ejecutivo federal. Debemos evitar que en el futuro los trabajadores y los usuarios de los servicios públicos descentralizados paguen los altos costos de la incompetencia de los amigos del presidente, que juegan a ser directivos con el patrimonio de los mexicanos.

La propuesta considera que en el contexto de la economía mixta, como mandata la Constitución, y de la especialización técnica y operativa inherente a las entidades paraestatales resulta fundamental revisar continuamente el andamiaje jurídico administrativo de dichas empresas, sobre todo después de haberse comprobado la vulnerabilidad de éstas con aventurados golpes de timón de parte del Ejecutivo federal.

De acuerdo con el Centro de estudios de derecho e investigaciones parlamentarias de la Cámara de Diputados, se indica que el Ejecutivo federal ejerció facultades legislativas extraordinarias –adujo la exposición de motivos presentada por el diputado Vázquez–, cuando resultaba necesario contar con la autorización del Congreso.

“Debemos recordar que con la Ley Federal de Entidades Paraestatales, el Congreso ha pretendido regular la organización y el funcionamiento de los organismos descentralizados, las empresas de participación estatal mayoritaria y los fideicomisos públicos en tanto unidades auxiliares de la administración pública federal, con la idea de garantizar altos estándares de desempeño y eficiencia en áreas estratégicas de la economía nacional para beneficio de toda la población.

Por ello resulta preocupante que, ante su propia incapacidad para conducir con eficiencia las entidades paraestatales, el propio Ejecutivo federal comience a incurrir habitualmente en acciones como la que recientemente atestiguamos en relación con Luz y Fuerza del Centro.

De tal forma, la iniciativa de cambio al reglamento interno del Congreso pretendería blindar a las entidades paraestatales ante cualquier determinación de cierre, extinción o desaparición: Calderón cayó en facilismo autoritario. Cubrir la incompetencia de los directivos nombrados por él con la extinción de la entidad paraestatal que es propiedad de todos los mexicanos debe evitarse para el futuro.