Reconocen su honestidad intelectual y espíritu crítico
en favor de los marginados
Jueves 24 de junio de 2010, p. a11
La Comisión Permanente del Congreso de la Unión rindió ayer homenaje al recién fallecido Carlos Monsiváis; se guardó un minuto de silencio durante la sesión y todas las fuerzas políticas expresaron pesar por el deceso del escritor, al que reconocieron su gran obra literaria y periodística, así como su compromiso social.
Su honestidad intelectual y su espíritu crítico lo acercó a las causas de los marginados, de los excluidos, de los sin voz
, expuso ante el pleno la senadora del PRD Rosalinda López. Dijo que se le evoca junto a los estudiantes del 68, con los damnificados del sismo de 1985, con la lucha por la transición democrática, por las libertades sexuales.
La legisladora recordó la voz valiente
de Monsiváis junto a los indígenas, los familiares de los mineros de Pasta de Conchos, los trabajadores de Cananea. Hizo de la lucha del Sindicato Mexicano de Electricistas, su lucha.
Fiel a sus maestros liberales, Monsiváis fue un riguroso defensor del Estado laico y de una sociedad tolerante, equitativa y justa.
Igualmente, el diputado del Partido del Trabajo Mario Di Constanzo resaltó que el cronista urbano del país siempre estuvo claro del atropello contra Andrés Manuel López Obrador en 2006 y marchó codo a codo con miles de mexicanos para demandar que se limpiara la elección
.
Por el PRI, el diputado Ricardo López Pescador resaltó que Monsiváis fue y seguirá siendo referente de la vida cultural e intelectual del país. Fue un hijo predilecto de la ciudad de México, pero es un regalo para un país ávido de razón, inteligencia, profundidad.
A nombre del PAN, la diputada Gabriela Cuevas dijo que el escritor contribuyó a crear conciencia de los problemas que aquejan a la sociedad y el diputado del Partido Verde, Pablo Escudero resaltó que todas las palabras se quedan cortas frente a lo que Monsiváis hizo por México.
Por su parte, las senadoras María de los Ángeles Moreno, del PRI y María Rojo, del PRD, propusieron que haya una sesión solemne, del Congreso, como mínimo homenaje a un gran intelectual
.