Potchefstroom, 22 de junio. Nos preparamos para la batalla del viernes, afirmó el entrenador español Vicente del Bosque, quien anticipó la dureza del duelo ante Chile, partido del que habla hace mucho tiempo, considerado el estelar del grupo H por el buen momento que atraviesan ambas selecciones. Sin embargo, la inesperada caída de España ante Suiza elevó el duelo a una nueva dimensión.

El equipo andino encabeza el sector con seis puntos y lo escoltan España y Suiza, ambas con tres. Lo más probable es que el perdedor del duelo del viernes en Pretoria Chile-España se vaya a casa, ya que se espera un cómodo triunfo de los helvéticos ante Honduras, al que la furia roja venció 2-0 la víspera.

A propósito del encuentro con los catrachos, Del Bosque fue autocrítico: Nos hemos abierto, la distancia entre el primero y el último era muy grande. El sacrificio para la gente del medio campo fue de mucho esfuerzo, el comportamiento de la defensa estuvo bien, pero ante un rival más exigente nos hubiéramos convertido en un rival fácil.

El capitán español Iker Casillas declaró: Chile es nuestra gran final, mientras el centrocampista Xavi añadió: Ganamos una final ante Honduras y el viernes nos espera otra y Sergio Busquets agregó: O ganas, o te vas a casa.

Ambas selecciones presentan más similitudes que compartir el color de la camiseta. Tanto la roja chilena como la furia roja son valientes, defienden el buen futbol, las variantes de juego y la llegada al área contraria. Hasta se parecen en la cantidad de ocasiones de gol que desperdician.

Chile es aplicado. Tiene buenas individualidades y juego de conjunto. Los equipos latinoamericanos están llevando la iniciativa en este Mundial. Al jugar tantos partidos en la fase de clasificación se han convertido en equipos como un club, auténticos equipos, consideró Del Bosque.

Vencer a los ibéricos y pasar a octavos en primer lugar del sector obsesiona a los chilenos, no sólo por el prestigio que conllevaría, sino porque los libraría de enfrentar a Brasil en la segunda fase del torneo.

El hecho de que en estos dos juegos España no haya sorprendido no quiere decir que no sea la de antes. Todos sabemos de su calidad e individualidades que te pueden complicar un partido, anotó el chileno Mark González.