La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) obsequiará 20 millones de banderas mexicanas a familias del país para que las coloquen en sus hogares y conmemoren con entusiasmo y alegría el bicentenario de la Independencia, anunció el presidente Felipe Calderón.

Los paquetes que enviará el gobierno federal por conducto del Ejército incluirán también la letra del Himno Nacional y folletos informativos, de acuerdo con la Sedena.

En el Campo Marte –donde recibió estandartes usados en la guerra de Independencia con las imágenes de la Virgen de Guadalupe y del arcángel San Miguel que estaban en poder de España–, el titular del Ejecutivo se enorgulleció de que en México las libertades se ejercen a plenitud y sin cortapisa alguna.

Con la banda presidencial al pecho, el mandatario federal encabezó una vistosa ceremonia en la que participaron cientos de elementos del Ejército y de la Policía Militar –con excepción de marinos–, además de integrantes de su gabinete y representantes de los poderes de la Unión.

Rodeado de militares, Calderón anunció el envío de las banderas por conducto de las fuerzas armadas, que según fuentes castrenses colaborarán en la preparación de los 20 millones de paquetes, pero no en la confección de los lábaros patrios.

La dependencia cuenta con la Fábrica de Vestuario y Equipo, donde se producen las insignias oficiales que utilizan las fuerzas armadas y las dependencias gubernamentales, sobre todo federales. Sin embargo, la Sedena, que encabeza el general Guillermo Galván Galván, no tiene nada que ver con la fabricación de las banderas, precisaron los funcionarios.

La distribución de los paquetes estará a cargo del Servicio Postal Mexicano, indicaron los funcionarios consultados.

Al mencionar los motivos para celebrar el bicentenario, comentó que México ha dado al mundo mujeres y hombres talentosos en las ciencias, artes, humanidades y el deporte, sin mencionar a alguno en particular.

Aprovechó su discurso para insistir en que “frente a los enemigos de la patria, los mexicanos triunfaremos cobijados en la potencia y el señorío de nuestra bandera nacional.

Apoyo divino de la Virgen

Calderón había recibido en Santander, España, los dos estandartes tomados por las tropas realistas en la batalla de Puente de Calderón en 1811. Según el mandatario, son las primeras banderas mexicanas que imaginaron los hijos de estas tierras para obtener la libertad y la independencia.

Explicó que la Virgen de Guadalupe conjuntaba el poderoso símbolo nacional y un apoyo divino en la lucha que se emprendía por la libertad, mientras la figura de San Miguel representaba al patrono de la Nueva España.

Los estandartes serán restaurados en el Castillo de Chapultepec por el Instituto Nacional de Antropología e Historia y luego mostrados en una exhibición en Palacio Nacional con motivo del bicentenario.