Ciudad del Cabo, 15 de junio. Treinta y seis mujeres holandesas que asistieron el lunes al partido entre la selección de su país y Dinamarca ataviadas con vestidos cortos naranjas fueron interrogadas por la FIFA debido a una presunta campaña publicitaria de una cerveza en el Mundial.

La Budweiser es la cerveza oficial del torneo que se disputa en Sudáfrica, y el organismo que rige el deporte protege con fiereza a sus patrocinadores frente a marcas que no son sus socios.

Los hinchas holandeses son famosos por sus vestimentas color naranja, pero las mujeres, sentadas juntas, aplaudiendo, cantando al unísono y con ropa producida por el fabricante de cerveza holandés Bavaria, llamaron la atención de expertos que detectan campañas publicitarias.

Bavaria ha chocado con la FIFA en ocasiones anteriores por proporcionar a los aficionados en los estadios la vestimenta naranja que identifica a la marca. En Alemania 2006, unos 20 hombres vieron a su selección en Stuttgart en ropa interior, luego de que oficiales de seguridad les ordenaron quitarse unos trajes típicos bávaros que incluían la marca de la competencia.

Lo que parece haber sucedido es que hubo una clara actividad de mercadeo de emboscada llevada adelante por una compañía cervecera holandesa, dijo el portavoz de la FIFA, Nicolas Maignot.

Peel Swinkels, del comité ejecutivo de Bavaria, dijo que la reacción de la FIFA es ridícula, pues no tiene el monopolio del naranja y la gente tiene la libertad de vestirse como quiere. Este año decidimos quitar el nombre de la marca de los vestidos, por lo que sucedió hace cuatro años.