Tras un primer tiempo para el olvido, el pentacampeón mejoró un poco en el segundo
El juego del equipo de Dunga fue lento y sin creatividad
Se ubica como líder del grupo G
Miércoles 16 de junio de 2010, p. 2
Johannesburgo, 15 de junio. La selección brasileña quedó en deuda en su debut en el Mundial de Sudáfrica, al vencer 2-1 a Corea del Norte, pues en ningún momento mostró juego colectivo y creó pocas ocasiones de gol ante un débil rival.
Maicon abrió el marcador a los 55 minutos, después de un primer tiempo patético de los pentacampeones, que luego lograron ampliar gracias a un gol de Elano, a los 72. Jin Yun-Nam marcó el tanto de honor norcoreano a un minuto del final.
Quizás por el frío intenso en Johannesburgo, los brasileños fueron irreconocibles durante el primer tiempo. El equipo dirigido por Carlos Dunga estuvo flojo, lento y parecía impotente para imponerse sobre una Corea del Norte que hacía poco más que defenderse con disciplina y arriesgar algunos ataques en velocidad por las bandas, que irremediablemente naufragaban a la hora de rematar.
Con el astro Kaká y el artillero Luis Fabiano totalmente apagados, la fuerza ofensiva de la verdeamarelha estuvo limitada a unos pocos destellos creativos del delantero Robinho, quien a los siete minutos lanzó un disparo que pasó cerca del arco defendido por Ri Myong-Guk.
El portero debió intervenir a los 25 minutos, para frustrar la mejor oportunidad sudamericana del primer tiempo: un disparo de Maicon.
Corea del Norte, a su vez, superó el nerviosismo de los 20 minutos iniciales e intentó algunas jugadas de ataque por las bandas, en general comandadas por su solitaria estrella, Jong Tae-Se, quien a veces logró sembrar intranquilidad en la defensa adversaria, pero tuvo una falla tras otra a la hora de definir.
El guardameta brasileño Julio César trabajó por única vez a los 11 minutos, para atajar sin esfuerzo el único disparo de Tae-Se que fue rumbo al arco.
Al final de un primer tiempo para el olvido, el marcador seguía igualado en cero, y se escucharon los primeros abucheos desde las gradas del Ellis Park.
Brasil volvió sin cambios para el complemento, pero se mostró más ágil y dispuesto. A los 53, Robinho volvió a asustar con un disparo desviado y, dos minutos más tarde, el lateral derecho Maicon recibió un lanzamiento en profundidad de Elano por la banda derecha y, sin ángulo, remató con un disparo cruzado que el portero norcoreano no logró atajar.
A partir del gol, Brasil volvió a parecerse algo más a Brasil.
Kaká ejerció su función de cerebro del equipo y creó algunos arribos hasta ser remplazado por Nilmar.
Sólo que siguió mal el artillero Luis Fabiano, quien a los 64 minutos realizó su primer intento serio de poner fin a los ocho meses de ayuno de goles con la camiseta amarilla, aunque desperdició la oportunidad con un disparo desviado.
A los 72, la canarinha amplió la ventaja tras un lanzamiento perfecto de Robinho para que Elano marcara el gol, que ambos festejaron bailando.
Corea del Norte todavía tuvo tiempo para acortar distancias gracias a un veloz ataque individual por la banda izquierda de Ji Yun-Nam, quien remató con un disparo que Julio César, uno de los mejores del mundo, no logró atajar.
El triunfo dejó a Brasil como líder solitario del grupo G, pero el futbol exhibido hoy estuvo muy lejos de ser la tarjeta de presentación de un candidato al título.
Norcorea se ubica en el último lugar de la lista dentro de las 32 selecciones que disputan este torneo y regresa a un Mundial tras 44 años de ausencia.