Ciudad del Cabo, 14 de junio. Tan sólo unas horas después de que la policía sudafricana reprimió una protesta de trabajadores contratados para la seguridad en Durban, y dos horas antes del partido entre Italia y Paraguay, los guardias de seguridad de una compañía privada se declararon en huelga en el inmueble de Green Point, también por motivos salariales.

La FIFA anunció entonces que el encuentro no se cancelaría porque intervino la fuerza de seguridad local. El comité organizador pidió a la policía sudafricana que tomara el control de las operaciones de seguridad en los estadios de Ciudad del Cabo y de Durban hasta nuevo aviso, se difundió en un comunicado.

La solicitud se produjo después que guardias abandonaron su puesto de trabajo, tras una discusión sobre sus salarios con los empleadores, añadieron los organizadores.

Durante las primeras horas de la jornada, brigadas antidisturbios había dispersado en Durban con gases lacrimógenos y balas de goma una manifestación de cientos de personas empleadas en el estadio Moses Mabhida, quienes exigían el pago de los salarios prometidos antes del inicio de la Copa del Mundo.

Organizamos una protesta pacífica porque no nos pagaron lo que esperábamos y nos sorprendió que la policía haya cargado contra nosotros, usaron gases lacrimógenos, denunció Sydney Nzoli, una de las personas que iniciaron el reclamo porque recibieron un pago menor a lo acordado, ya que se les entregaron 190 rands (unos 24.50 dólares) por jornada, en lugar de los 425 rands estipulados en los términos de su contrato.

Aunque la policía reportó dos detenidos y control de la manifestación sin contratiempos, testigos aseguraron que una mujer resultó herida por bala de goma.

En ese caso, la FIFA se deslindó de los hechos, al calificarlos de un problema entre empleado y empleador, pero prometió investigar lo sucedido con el pago a los trabajadores. El comité organizador aseguró que se vieron obligados a usar la fuerza para evacuar la zona ante la negativa de los manifestantes a marcharse de los alrededores del estadio.