El gobierno de Estados Unidos hizo público este jueves el resultado de 22 meses de investigaciones conjuntas con autoridades de México en contra de narcotraficantes que operaban en ambos países y destacó que en ese tiempo fueron detenidas 2 mil 266 personas vinculadas al tráfico de drogas, 429 de ellas tan sólo en una acción realizada el pasado miércoles en 16 estados de ese país.

Durante una conferencia de prensa efectuada ayer en Washington, el fiscal general, Eric Holder, expuso que los operativos realizados durante casi dos años formaron parte del denominado Proyecto Deliverance, una investigación bilateral centrada en la infraestructura de transporte en la región, la cual era usada por los cárteles mexicanos para distribuir droga en el vecino del norte.

Holder detalló que en las autoridades estadunidenses y mexicanas han decomisado en 22 meses 154 millones de dólares, 2.5 toneladas de cocaína, más de 700 kilos de heroína, 600 de metadona, 69 toneladas de mariguana y 501 armas.

Dijo que entre los detenidos destaca el mexicano Carlos Ramón Castro Rocha, El Cuate, arrestado el pasado 30 de mayo en el estado de Sinaloa. Se trata de uno de los más importantes distribuidores de heroína en Estados Unidos, a quien –señalaron– realizaban transferencias bancarias por al menos 2 millones de dólares mensuales.

Cambiaron métodos de transporte

De su lado, fuentes del Departamento de Justicia del gobierno estadunidense revelaron ayer en México que para contrarrestar la estrategia federal anticrimen implementada a partir de 2006 por el gobierno de Felipe Calderón, integrantes de todos los cárteles que operan en México y trafican heroína hacia Estados Unidos se han asociado con una red de transportistas independientes que envían cargamentos por vía terrestre en camiones con depósitos ocultos.

Al ofrecer detalles sobre los resultados de las pesquisas del llamado Proyecto Deliverance, los funcionarios estadunidenses refirieron que agrupaciones criminales como Los Zetas, La Familia o los cárteles de Sinaloa, Golfo y Juárez, entre otras, han optado por apartarse de los métodos tradicionales de traslado de la heroína a Estados Unidos, que consistían en utilizar su propia infraestructura para el trasiego del estupefaciente.

Ahora contratan los servicios de empresas particulares identificadas por la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, por la denominación en inglés) como “keepers”. Se trata de compañías mexicanas que ofrecen en varias entidades del país servicio de transporte de carga hacia Estados Unidos. Sus flotillas de camiones cruzan la línea fronteriza del vecino país simulando llevar productos del comercio legal, cuando en realidad transportan cargamentos con heroína oculta en dobles fondos.

Los funcionarios que proporcionaron esta información añadieron que el sujeto apodado El Cuate enfrenta cargos penales en la corte federal del distrito oeste de Carolina del Norte, donde se le acusa de asociación delictuosa para importar y distribuir cocaína, así como de importación, posesión y distribución de heroína.

El Proyecto Deliverance se añade a dos operativos develados el año pasado: la Operación Xcelerator, contra el cártel de Sinaloa, con más de 780 detenciones, y el Proyecto Coronado, contra La Familia Michoacana, con casi mil 200 detenciones también en casi dos años.

Antes, en Washington, el fiscal Holder indicó que “esta operación interagencial y transfronteriza ha sido el esfuerzo policial más amplio y más exitoso hasta la fecha contra estos mortales cárteles”, y subrayó que el Proyecto Deliverance no habría sido posible sin la ayuda del gobierno mexicano y su valerosa batalla contra el narcotráfico.

Uno de los golpes más fuertes contra el narcotráfico dentro de esta larga operación se produjo la víspera, cuando una acción simultánea en 16 entidades de Estados Unidos se saldó con el arresto de 429 personas y la incautación de 5.8 millones de dólares, 112 kilos de cocaína, unos 45 de heroína y casi mil 500 de mariguana, además de 141 armas y 85 vehículos.

Sin embargo, aunque según el fiscal general estadunidense el Proyecto Deliverance supone un golpe significativo a los cárteles, advirtió de que no es más que una batalla en una guerra que continúa.

En este sentido, defendió la petición realizada por el presidente estadunidense, Barack Obama, para incrementar en 500 millones de dólares el presupuesto para seguridad fronteriza, además de anunciar el despliegue de hasta mil 200 efectivos de la Guardia Nacional a lo largo de la frontera con México.

En ese contexto, La Jornada tuvo acceso ayer al informe del Departamento de Justicia de Estados Unidos denominado Evaluación de la Amenaza Nacional sobre Drogas 2010, en el cual se describe que los cárteles mexicanos de las drogas han diversificado sus métodos de trasiego de heroína a Estados Unidos para evitar el decomiso de sus cargamentos en territorio mexicano.