Johannesburgo, 4 de junio. El Mundial de Sudáfrica 2010 se disputará con temperaturas muy diferentes a los anteriores. La situación del país en el hemisferio sur hará que se realice con el frío del invierno, por primera vez desde la experiencia de Argentina 1978.

Jugadores con camisetas de mangas largas, vaho al hablar e hinchas con abrigos son imágenes insólitas que seguramente se darán en junio y julio en el país africano, como ya quedó patente durante la Confederaciones 2009, en la que las temperaturas gélidas fueron protagonistas en algunos partidos.

El frío aquí es peor que en Europa, es algo raro, señaló en aquel momento el brasileño Luis Fabiano, quien se vio afectado por una gripe durante aquel torneo.

En partidos como la semifinal España-Estados Unidos, en Bloemfontein, la temperatura fue cercana a cero grados centígrados e incluso desde la selección brasileña se pidió un cambio de los horarios del Mundial para evitar el mal tiempo, por la gran diferencia térmica entre el día y la noche.

Es un tema que ya está discutido. En el Mundial 2010 habrá partidos con luz natural y artificial, respondió el secretario general de la FIFA, Jérome Valcke, quien confirmó duelos nocturnos. El presidente del organismo, Joseph Blatter, dijo estar seguro de que esa decisión era la correcta y restó importancia al frío.

“Habrá un poco más, pero la mayoría de los futbolistas brasileños juegan en Europa, con temperaturas inferiores a cero grados y en la Copa Confederaciones nunca se llegó a tanto. Pese a todo, Brasil ganó el título. Si hace más frío, que corran más rápido, señaló el dirigente suizo.

En anteriores citas, empezando por Alemania 2006, el calor fue protagonista y el torneo se disputó con altas temperaturas y clima soleado, algo que se acentuó en ediciones como México 1986 o Estados Unidos 1994.

Es mejor jugar con frío en vez de un calor terrible cuando es difícil respirar, como en 2002 (Mundial de Corea del Sur y Japón) o en 2006 (en Alemania), apuntó Blatter.

La reciente final olímpica en Pekín (Argentina-Nigeria) tuvo que interrumpirse tras 30 minutos de juego porque hacía demasiado calor. Se juega mejor futbol si hace frío, añadió.

Será la quinta Copa del Mundo disputada en el hemisferio sur, aunque sólo Uruguay 1930, Chile 1962 y Argentina 1978 se vieron afectados en mayor o menor grado por el clima gélido, ya que en Brasil (1950) hubo temperaturas más cálidas.

Sudáfrica tiene grandes diferencias climáticas, con un tiempo habitualmente soleado y templado. Los inviernos tienden a ser moderados, aunque la situación cambia entre la costa y el interior. Más de 40 por ciento del territorio del país está por encima de los mil 210 metros sobre el nivel del mar.

En Ciudad del Cabo el promedio en invierno ronda los siete grados centígrados y la mayor parte de las precipitaciones se concentran en esa zona del año, mientras Durban cuenta con un clima más suave, con temperaturas medias entre los 23 grados la máxima y los 11 la mínima.

En la zona de Johannesburgo, donde se concentrarán el mayor número de partidos y donde está programada la gran final del 11 de julio, el clima se ve afectado por su elevación a mil 753 metros, en la planicie de Highveld, con medias de 16-17 de máxima y apenas cuatro de mínima.

Para comenzar a adaptarse a la altitud y a las temperaturas varios equipos decidieron concentrarse en los Alpes europeos antes de ir al Mundial.

En previsión de un fuerte incremento de la demanda energética por la llegada masiva de visitantes, el gobierno sudafricano garantiza que no habrá apagones ni problemas de suministro.