La Procuraduría General de la República (PGR) inició una indagatoria por los delitos de delincuencia organizada y los que resulten para dar con los responsables de haber arrojado al menos 25 cuerpos a una fosa clandestina localizada el pasado sábado cerca del poblado San Francisco Cuadra, en Taxco de Alarcón, Guerrero, revelaron fuentes ministeriales que participan en la investigación. Efectivos del Ejército Mexicano y de la Armada de México también coadyuvan con las autoridades investigadoras.

De acuerdo con las primeras pesquisas, las autoridades cuentan con indicios de que la fosa era utilizada por lo menos desde hace tres meses por algún grupo criminal ligado al narcotráfico, debido a que el tiempo de putrefacción de algunos de los cadáveres era avanzado.

No se han emitido reportes oficiales de las autoridades militares o civiles federales respecto a este hallazgo. Sin embargo, las fuentes consultadas revelaron que este domingo continuó un dispositivo de búsqueda en el poblado San Francisco Cuadra, donde elementos del Ejército Mexicano y las policías federal, estatal y ministerial de Guerrero participan de manera coordinada.

En la ciudad de México, hasta el cierre de esta edición, ni la PGR ni las autoridades militares habían emitido algún comunicado sobre ese hecho. En el departamento de comunicación social de la PGR, un funcionario de guardia refirió que hasta el momento, “de manera oficial, las autoridades federales (civiles y militares) únicamente han reconocido que en la fosa se hallaron dos cuerpos. Sin embargo, desde el sábado trascendió en círculos policiacos de Guerrero que en la tumba habría por lo menos 25 cadáveres. De acuerdo con las fuentes consultadas, el lugar donde fue hallada la fosa tiene una profundidad de unos 180 metros y este domingo continuaban las tareas para el rescate de los restos humanos.

Una de las víctimas fue identificada como Daniel Bravo Mota, director del penal de Tuxpan, municipio de Iguala, quien fue reportado como desaparecido desde el lunes. La hija del funcionario estatal hizo el reconocimiento del cuerpo. Hasta el momento se desconoce el paradero del sicólogo del penal, Ignacio Suástegui Pérez, quien fue privado de su libertad junto con Bravo Mota. El encargado de despacho de la procuraduría, Albertico Guinto Sierra, aseguró que cuando menos los trabajos para retirar los 25 cuerpos podría durar hasta una semana, debido a que se tardan cuatro horas por cada cuerpo debido al difícil acceso al lugar, que tiene una pendiente de más de 150 metros.