Pachuca, Hgo., 25 de mayo. El retraso en la construcción de la refinería Bicentenario ha generado inquietud en el gobierno de Hidalgo. El ejecutivo estatal, Miguel Angel Osorio Chong, anunció que de cancelarse o seguirse posponiendo la obra demandará a Petróleos Mexicanos (Pemex) por incumplimiento, y al gobierno federal la indemnización por el pago de mil 500 millones de pesos que pidió prestados el gobierno hidalguense para la compra de las 700 hectáreas destinadas a ese propósito.

En tanto, personal de Pemex comenzó a instalar postes metálicos y malla ciclónica alrededor del polígono donde se pretende instalar la refinería. Todo esto sin dar aviso a las autoridades estatales ni municipales.

Por separado, el gobernador Osorio Chong y el alcalde de Atitalaquia, municipio donde se encuentra la mayor porción de tierras para la refinería, reconocieron que Pemex no les ha notificado de estas acciones.

Blindaje, anuncia Osorio Chong

Osorio Chong anunció un blindaje sobre posibles daños económicos, en caso de que la Federación cancele o posponga el arranque de la obra, y anticipó que demandará a Pemex por incumplimiento de obra, para de ese modo restituir los daños que la demora ha ocasionado al presupuesto estatal y a los propios lugareños que se desprendieron de sus tierras, con la esperanza de que se beneficiarían con la obra.

Personal de Pemex ha comenzado a instalar el cercado; incluso ha colocado letreros con la leyenda: Prohibido el paso, propiedad federal, pero no se ha notificado a las autoridades de estas acciones, informó el alcalde de Atitalaquia, Leonardo Olguín Prado, quien no sabe si el cercado es el comienzo de la construcción de la refinería.

Algunos diputados federales del PRI, como Ramón Ramírez Valtierra, y Paula Hernández Olmos, cuestionaron las declaraciones de la secretaria de Energía, Georgina Kessel, quien dijo que se necesita tiempo para planear bien la obra y evitar sobrecostos o retrasos. Añadió que el proyecto de la refinería, que procesará 250 mil barriles de petróleo crudo por día, va en tiempo.

Paula Hernández consideró que todo se debe a una estrategia político-electoral, pues el gobierno de Felipe Calderón quiere esperar los resultados del 4 de julio de los comicios en Hidalgo y luego retomar el proyecto.

Ramón Ramírez consideró que el gobierno estatal enfrenta un serio problema con sus finanzas, pues tuvo que endeudarse para adquirir los terrenos.