Crisis del Euro
Martes 25 de mayo de 2010, p. 26
La estrella del FMI ha ascendido a lo largo de la crisis económica global. Las aportaciones de sus miembros han triplicado su potencia. Ha rescatado economías desde Hungría hasta Pakistán. Pese a estos logros, sus actividades no se han extendido hacia el corazón del mundo rico.
Eso está cambiando. Si bien flanqueado en un principio por la Unión Europea, el FMI acabó trazando los términos del rescate masivo de Grecia y aportando parte de los fondos. Y el 10 de mayo anunció que proporcionaría 250 mil millones de euros (mde, 317 mil mdd) para complementar su fondo de estabilización de 500 mde para apoyar a los miembros más débiles de la eurozona.
Los detalles de la aportación prometida no están claros. El Fondo asegura que no ha apartado dinero para el rescate y que la cifra de 250 mil mde es teórica e hipotética
, y lo es por una buena razón: si la hubiera aportado de inmediato, quedaría sin capacidad para prestar a otro país que se metiera en líos. Al 6 de mayo, su capacidad total de préstamo para este año era de 272 mdd, o 215 mde. Jamás ha prestado tanto de un solo golpe.
Desde luego, podría encontrar más dinero. Su consejo aprobó recientemente extender sus arreglos vigentes para pedir préstamos por más de 500 mil mdd a gobiernos y bancos centrales. Pero casi la mitad de esa cifra ya está incluida en su actual capacidad de prestar. Para activar el resto, muchos gobiernos tendrían que buscar aprobación legislativa.
Hay otras opciones. El FMI obtendrá más dinero al final del año por un aumento general de cuotas, y el año pasado hizo una emisión especial de 250 mil mdd en derechos especiales de giro (DEG), su cuasi divisa, los cuales se reparten en las reservas de los países en proporción a su cuota. Dominique Strauss-Kahn, director del Fondo, cree que los países podrían prestar a otros algo de ese dinero, pero no hay precedentes de un intercambio masivo de DEG.
También podría recurrir a algunos países ricos en reservas. Algunos ya le han prestado: China adquirió 50 mil mdd de títulos que el Fondo emitió el año pasado, y Brasil, Rusia e India compraron mil cada uno. Pero algunos de esos países están molestos porque no se les consultó antes de acudir al rescate de Europa. Eswar Prasad, ex jefe de la sección del FMI en China, señala que todo esto lleva a las viejas preguntas de si la lealtad principal del Fondo es hacia sus principales accionistas, EU y la UE
.
Algunos se preguntan también si las ambiciones políticas de Strauss-Kahn, de quien se dice que está interesado en postularse a la presidencia de Francia, estuvieron detrás de la prisa por sumarse al rescate. Simon Johnson, alguna vez economista en jefe del organismo, comenta que un ex ministro francés de Finanzas es la peor persona posible para encabezar negociaciones destinadas a salvar el euro. Los conflictos de intereses son tremendos
.
Las aventuras europeas del FMI podrían impulsar las aspiraciones de Strauss-Kahn, pero las consecuencias para la institución que dirige son menos claras.
Fuente: EIU
Traducción de texto: Jorge Anaya