Toluca pinta de rojo los torneos cortos
Final sin futbol, pero con drama
oluca se confirmó como el equipo más ganador de los torneos cortos. Números impresionantes de los rojos: siete títulos y nueve finales desde que se instauró esta forma de competencia, en el Invierno 1996.
Los logros podrían explicarse por la continuidad en el trabajo y una buena elección de técnicos y jugadores, lo cual habla bien de la directiva escarlata. Se han coronado entrenadores tan diferentes como Enrique Meza, Ricardo La Volpe –aunque en el Apertura 2002 aparezca el nombre de su auxiliar Alberto Jorge–, Américo Gallego y José Manuel de la Torre.
Los Diablos Rojos se han repuesto de bajas tan fundamentales en diferentes etapas como las de José Cardozo, Paulo da Silva, Vicente Sánchez y Hernán Cristante, e inclusive se podría contar la del directivo Rafael Lebrija.
Se van las personas y las instituciones permanecen, lo que habla de un trabajo de fondo que le permite trepar al segundo lugar en la tabla histórica de los títulos, junto a unas Águilas que siguen volando bajo y que vieron alejarse la contratación del Chepo de la Torre. El sitio de honor corresponde a Chivas, con 11.
Si en la final del Bicentenario 2010 faltó el futbol, sobró el dramatismo. Y si los jugadores en muchos momentos se vieron simplemente caminando sobre la cancha, no se debió a su falta de entrega o a que no comprendieran cabalmente que se trataba de un duelo crucial, sino al horario en que las televisoras ordenan que se juegue en México. Jugar al mediodía –en una altitud como la de Toluca– es tal vez algo que sólo sucede aquí.
Es la tercera coronación del Chepo en La Bombonera: dos con los rojos y una con Chivas. Muchos ya lo ubican como el próximo técnico de la selección, ya que Javier Aguirre anunció que no nos hará el favor de seguir dirigiendo al Tri.
De la Torre fue un fino mediocampista que incluso llegó a jugar en España cuando la exportación de mexicanos era algo casi imposible. Y ahora como técnico ha demostrado formar equipos compactos que se imponen a cuadros con mejores individualidades.
La final sirvió para exhibir a varios. Sinha estaba teniendo su liguilla de revancha y cada partido jugado era una cachetada con guante blanco para los que no lo llevaron a la selección nacional, hasta que se presentó el primer penal y toda su indiscutible clase se transformó en una gran irresponsabilidad.
Lamentable caso es también el de Matías Vuoso. Muchos todavía recuerdan que un gol suyo sirvió para que México siguiera vivo rumbo a Sudáfrica y en el primer duelo logró el agónico 2-2, pero al abanicar el esférico durante el juego y luego su forma de disparar el penal hicieron recordar los tiempos en que vistió la playera americanista.
El chileno Héctor Mancilla también tuvo una final para el olvido. En el duelo en Torreón falló un par de oportunidades inmejorables y ayer tuvo el tanto del campeonato en tiempo de compensación. Tal vez los rojos se arrepintieron de no haberlo cedido a su representativo.
El décimo título rojo llegó, como se esperaba por lo visto en la liguilla, de la mano del guardameta Alfredo Talavera. Cuando se supo que Cristante era baja para todo el torneo, la mayoría consideró que en la portería estaba el punto débil del equipo.
Sin embargo, el arquero tuvo una liguilla de ensueño. En el primer duelo realizó soberbias atajadas y en La Bombonera se dio el lujo de parar el balón hasta con el rostro, y finalmente detuvo el penal decisivo cobrado por un Fernando Arce que antes era jugador de selección.
Es de destacar el defensa Édgar Dueñas, quien se ha convertido no sólo en el líder de la zaga, sino que ayer demostró a Sinha y Mancilla cómo se deben tirar los penales. Durante la semana los aficionados rojos agradecieron a Aguirre no haberse llevado a Sinha y a Dueñas al Tri. En el caso del defensa tuvieron razón.
Para el próximo torneo las televisoras aumentaron su control sobre el balompié con el regreso del Necaxa y la contratación de Jaguares por Tv Azteca, con lo que entre las dos dominan casi 30 por ciento del balompié nacional o futbol televisivo, mejor dicho.
Sufrieron sobre la hora, pero Chivas eliminó a Libertad de Paraguay y avanzó a las semifinales de la Copa Libertadores, instancia a la que llegará con equipo completo y tendrá muchas posibilidades ante la Universidad de Chile.
Y mientras los planteles se arman para el próximo torneo –sobre todo Pachuca con Braulio Luna y Herculez Gómez–, Morelia ratifica a Tomás Boy y San Luis a Ignacio Ambriz en la dirigencia técnica, y el Tuca Ferretti olvidó su compromiso de palabra con Pumas y se rayó en la chequera con Tigres, pero sufrirá para alejarlo del descenso.
