Oaxaca, Oax., 20 de mayo. El Ejército Popular Revolucionario (EPR) afirmó que la detención y desaparición de sus compañeros Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez –el 25 de mayo del 2007– se dio en el contexto de la necesidad de estar participando en el movimiento de masas que se desarrollaba en Oaxaca.

Su presencia física en la protesta de ese día obedeció a la necesidad de dar continuidad al movimiento del pueblo oaxaqueño, que es un pueblo politizado; el movimiento magisterial popular no podría haber sido espontáneo, porque tiene antecedentes organizativos y de lucha desde la década de los 70, señaló.

En un comunicado –con motivo del 16 aniversario de su fundación–, la Comandancia General del grupo armado sostiene que en la actual administración panista espuria se comprueba que el crimen de la desaparición forzada es una práctica recurrente dentro del Estado mexicano, que la ha implementado indistintamente que gobierne el PRI, el PAN o el PRD en cualquiera de los tres niveles de gobierno.

Y acusó que la responsabilidad de la detención-desaparición de sus compañeros recae directamente en el general Juan Alfredo Oropeza Garnica, Ulises Ruiz y Felipe Calderón. También, manifestó que la huelga de hambre realizada por mujeres y hombres del Sindicato Mexicano de Electricistas, en el Zócalo de la ciudad de México, es tan válida que constituye un ejemplo de resistencia popular y de dignidad humana.