Este año se espera que ocurran 30 huracanes, de los cuales cinco podrían ser de categoría intensa. La tendencia es que cada año esos fenómenos son más fuertes, manifestó Adrián Gálvez, director del Servicio Meteorológico Nacional.

Indicó que los ciclones en el Golfo de México pueden generar turbulencias que dispersarían el petróleo derramado por el hundimiento de la plataforma de la empresa British Petroleum, y destacó que por el momento no se esperan afectaciones a las costas mexicanas.

Vázquez Gálvez señaló que los huracanes generan una enorme cantidad de turbulencia, que en forma positiva pueden ayudar a diluir hasta cierto grado la mancha de crudo, y de manera negativa podrían dispersar los contaminantes sobre un área mayor.

La temporada de ciclones en el océano Pacífico comenzó el pasado 15 de mayo, y para el Atlántico empezará el primero de junio. Dijo que se esperan cuatro de categorías cuatro y cinco en el Atlántico, y uno más en el Pacífico.

Raúl Navarro Garza, coordinador general de Atención a Emergencias y Consejos de Cuenca de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), comunicó que desde enero pasado se pusieron en marcha programas de prevención de desastres. Ya se cuenta con todas las herramientas e información necesarias para enfrentar el impacto de esos fenómenos hidrometeorológicos y atender a la población afectada.

Para ello, la Conagua cuenta con 16 centros y mil 500 equipos para suministro de agua potable, unidades de transporte para carga pesada, material de apoyo, como plantas de luz, retroexcavadoras y equipos móviles de bombeo, así como infraestructura de radiocomunicación.