Economía
Ver día anteriorDomingo 16 de mayo de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 

Estrategia equivocada; Pemex tiene contratos por 10 y 15 años para comprar ese gas

Inyectar nitrógeno reduce la recuperación de petróleo y contamina pozos, denuncian

El volumen perdido tiene un valor actual de mercado superior a los 200 mil dólares diarios

Foto
Plataformas petroleras en la sonda de CampecheFoto Notimex
 
Periódico La Jornada
Domingo 16 de mayo de 2010, p. 29

La inyección de nitrógeno al campo petrolero Jujo-Tecominoacán, localizado en la Región Sur en Tabasco, es una estrategia equivocada que está reduciendo de forma constante la recuperación de petróleo crudo y contamina los pozos, por lo que Pemex Exploración y Producción (PEP) ha tenido que estrangular pozos y diferir producción, denunció el Grupo de Ingenieros Petroleros Constitución de 1917.

De acuerdo con informes proporcionados por el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI), tras la solicitud de información con número de folio 1857500027110, el campo Jujo-Tecominoacán ha cerrado pozos contaminados con nitrógeno desde mayo de 2008 a febrero de 2010, con lo que se ha dejado de producir un volumen de 2 mil 462 barriles diarios de crudo.

Adicionalmente, se han dejado de producir 555 barriles diarios de petróleo en pozos estrangulados y clasificados como producción diferida indefinidamente.

Es importante aclarar que para la mayoría de los ingenieros petroleros la producción diferida se considera como producción perdida. De esta manera, el volumen total de producción perdida es de 3 mil 17 barriles diarios con un valor actual de mercado superior a los 200 mil dólares por día o unos 6 millones 335 mil dólares al mes.

Francisco Garaicochea, presidente del grupo que aglutina a especialistas, ex trabajadores petroleros y académicos, consideró que el problema en PEP es que los análisis y las decisiones, cada vez menos las toman sus especialistas por la desintegración de sus cuadros capacitados, los cuales ya trabajan en otras compañías petroleras, y ahora son los funcionarios privatizadores y las compañías extranjeras contratadas las que toman las decisiones de mayor relevancia.

En los campos de Tabasco y el Golfo de México la petrolera mexicana ha suscrito contratos por 10 y 15 años para comprar nitrógeno sea utilizado o no pero que se tiene que pagar aunque se provoquen resultados negativos y pérdidas económicas multimillonarias.

Jujo-Tecominoacán, el octavo productor más importante del país, fue descubierto en 1980 y contiene petróleo ligero de muy alta calidad clasificado como 38 grados API, con gran aceptación en el mercado petrolero internacional.

Entre los argumentos recomendados por las compañías contratistas es que con la inyección de nitrógeno se iba a mejorar la recuperación de petróleo crudo; sin embargo, los últimos datos oficiales confirman que por el contrario la extracción de crudo va a la baja como ha ocurrido en otros campos que han implementado la inyección de nitrógeno, como Cantarell, Samaria y Ku.

El campo Jujo-Tecominocán alcanzó su producción máxima en 1986 con 206 mil barriles por día. Para 2009, un año después de aplicarse la estrategia de inyección de nitrógeno, la producción ya había caído a unos 65 mil barriles y en lo que va de 2010 la extracción de petróleo crudo se ha desplomado a un promedio de 50 mil barriles por día, es decir, una cuarta parte de la producción alcanzada hace 24 años.

Pemex inyecta 91 millones de pies cúbicos diarios de nitrógeno desde 2008 cuando se inauguró la planta criogénica de nitrógeno construida con una inversión de poco más de 110 millones de dólares. La expectativa de Pemex era que con este método se podría recuperar producción hacia niveles de entre 100 mil y 120 mil barriles diarios; sin embargo, actualmente se producen aproximadamente 50 por ciento de las expectativas, es decir, alrededor de 50 mil barriles por día.