Martes 11 de mayo de 2010, p. 38
El consumo excesivo de sal en los alimentos –aunado a factores como la edad, ingesta de grasas y falta de actividad física– además de ser un factor causante de obesidad y sobrepeso, incrementa el riesgo de hipertensión, enfermedades cardiovasculares y accidentes encefálicos, advirtieron especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Detallaron que las dietas actuales, en las que predominan los alimentos procesados de fácil preparación o precocidos, contienen cantidades excesivas de sal, por lo que en México cada habitante consume más de cinco gramos diarios de sodio, cifra que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera inconveniente y nociva para la salud.
Entre los productos con más sal están los embutidos o carnes frías (26.2 por ciento); pan, pastas instantáneas y frituras (19); queso (6.7) y platillos preparados (4.9).
La Organización Panamericana de la Salud considera que el consumo excesivo debe tratarse como problema cultural, y recomendó retirar los saleros de la mesa.