La sociedad de coinversión entre Impulsora Jalisciense y Pemex Refinación, celebrada desde 1993, que dio origen a la empresa Mexicana de Lubricantes para comercializar aceites, grasas, lubricantes y aditivos, ha implicado pérdidas para la paraestatal por más de 400 millones de pesos, entre 1997 y 2003, pese a que el nivel de ventas anual es cercano a 5 mil millones de pesos, revelan los últimos estados financieros liberados por el organismo subsidiario de Petróleos Mexicanos.

Sin embargo, las pérdidas patrimoniales desde enero de 1993 a la fecha podrían ascender a poco más de 25 mil millones de pesos, situación que es analizada por la fiscalía de delitos fiscales y financieros de la Procuraduría General de la República (PGR), revelan informes de Pemex.

De acuerdo con los documentos, liberados por el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública, cada año hay cambios importantes y ajustes en los estados financieros de la compañía privada, además de que en los últimos ejercicios a los que tuvo acceso Pemex Refinación no se llevó a cabo una auditoría a los mismos. Además se declararon inexistentes los estados financieros de los ejercicios 2004 y 2005.

Estas inconsistencias llevaron a ambas partes a enfrentar desde 2005 procesos judiciales y administrativos en relación con esta asociación, los cuales se encuentran en proceso deliberativo por las autoridades competentes.

El 7 de junio de 2006, Pemex Refinación presentó una denuncia ante la PGR por administración fraudulenta, debido a irregularidades cometidas por los miembros del consejo de administración de Mexicana de Lubricantes.

El 17 de julio de 2009 se exhibió una promoción ante la fiscalía de delitos fiscales y financieros, mediante la cual se acompañó el dictamen contable, que concluyó que el monto del daño patrimonial que sufrió Pemex Refinación como socio de Mexicana de Lubricantes asciende a 25 mil 828 millones de pesos.

Los peritos de la PGR acudieron ante el Ministerio Público que conoce de la indagatoria para recabar la información que les permita rendir su dictamen. Pemex Refinación espera que el Ministerio Público remita la averiguación previa a los servicios periciales de la PGR para que emitan su dictamen. Una vez que tengan los resultados del análisis de los peritos contables de la PGR se procederá a la determinación de la indagatoria.

El 17 de octubre de 2006, Pemex Refinación promovió un juicio ordinario mercantil en contra de Impulsora, donde reclama el ejercicio de la opción de compra de las acciones de Mexicana de Lubricantes, que son propiedad de Impulsora. El 30 de noviembre de 2009 se dictó sentencia absolviendo a Impulsora de las prestaciones reclamadas, con el argumento de que los estados financieros no se habían aprobado por la asamblea de accionistas y era una condicionante establecida en la escritura constitutiva de Mexicana de Lubricantes, necesaria para determinar si hubo o no utilidades. Pemex Refinación presentó recurso de apelación.

El 2 de febrero de 2007 Mexicana de Lubricantes interpuso una demanda mercantil contra Pemex Refinación, en la que se reclama, entre otras prestaciones, la nulidad de la rescisión y terminación anticipada de varios contratos. El 16 de marzo del 2010 se dictó sentencia definitiva absolviendo de todas las prestaciones a Pemex Refinación.