De 14 pozos trabajados hasta ahora, 13 resultaron secos y uno es productor de gas
La presunta existencia de esos yacimientos en el Golfo de México, argumento para abrir el sector a la inversión extranjera
Ha destinado $16 mil 798.5 millones a estudios y perforación
Domingo 9 de mayo de 2010, p. 23
Petróleos Mexicanos (Pemex) sigue sin encontrar el tesoro
en aguas profundas del Golfo de México pese a que ha invertido un monto total de 16 mil 798.5 millones de pesos en estudios y en la perforación de 14 pozos, de los cuales 13 han resultado secos y uno ha sido productor de gas.
El argumento utilizado para impulsar la reforma petrolera de 2008 y de esta manera permitir la participación de empresas petroleras internacionales en la exploración y explotación de crudo en aguas profundas fue que existe en el Golfo de México un tesoro
equivalente a unos 29 mil 500 millones de barriles de petróleo crudo equivalente, volumen que representa 54.8 por ciento de un total de recursos prospectivos de 53 mil 800 millones de barriles de petróleo.
Es importante aclarar que los recursos prospectivos no son reservas sino una cantidad estimada, a una fecha dada, de acumulaciones que todavía no se descubren. Se trata de cantidades inferidas de hidrocarburos que se consideran potencialmente explotables. La cuantificación de los recursos prospectivos está basada en información geológica y geofísica del área de estudio y en analogías con áreas donde cierto volumen original de hidrocarburos ha sido descubierto.
En junio llegará equipo
Según el escenario del tesoro
petrolero en aguas profundas que fue ampliamente publicitado en 2008 mediante una costosa campaña televisiva, el valor bruto probable, a 30 años, es de entre 850 mil millones de dólares y un billón 500 mil millones de dólares, de acuerdo con los cálculos del gobierno federal.
Informes obtenidos mediante el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI) revelan que sólo se han encontrado reservas probadas en el pozo Lakach-1 por 308 mil millones de pies cúbicos de gas.
De acuerdo con la información oficial avalada por las gerencias de reservas de hidrocarburos y proyectos de explotación (Grhype), de recursos y proyectos de exploración (Grype) y de recursos de inversión (Gri), adscritas a la Subdirección de Planeación y Evaluación de Pemex Exploración y Producción (PEP) de 2004 a la fecha se han invertido en la perforación de los 14 pozos 13 mil 279.2 millones de pesos y adicionalmente 3 mil 519.3 millones en estudios sismológicos y registros geofísicos, entre otros.
Los pozos perforados por PEP son Catamat-1; Chelem-1; Chuctaj-201; Etbakel-1; Holok-1; Kabilli-1; Labay-1; Lakach-1; Llaíl-1; Leek-1; Nab-1; Noxal-1; Tamha-1 y Tamil-1. El campo Lakach, descubierto en 2006, es el único en aguas profundas que cuenta con reservas probadas de gas.
Carlos Morales, director general de PEP, informó que en junio próximo llegará un equipo para perforar en tirante de agua superior a 500 metros de profundidad y en octubre llegará otro equipo con capacidad de perforar en profundidades de 10 mil pies para iniciar la exploración en el área de Perdido con el pozo Maximino.
Es importante señalar que desde 1996, en el Cinturón Plegado de Perdido, al sur del cañón de Alaminos, cerca de la frontera de Estados Unidos con México, Shell, Chevron, Exxon, British Petroleum, Nexen, Total y Unical han perforado una veintena de pozos exploratorios, a profundidades de agua de hasta 3 mil metros. Los resultados son nulos porque ningún pozo está produciendo porque son hoyos secos o no existe tecnología de explotación.
Morales Gil dijo que también se va a perforar otro pozo delimitador de Lakach y luego otro denominado Tamil 101, ubicado en la parte profunda del Golfo de Campeche.
Los reportes oficiales precisan que al 13 de abril de 2010 sólo se tiene trabajando en tirantes mayores de 500 metros a la plataforma Max Smith, de la compañía Noble Contracting Sarl, con una renta diaria de 484 mil dólares.
De esta manera, el programa de perforación en tirantes mayores a 500 metros para 2010 contempla la perforación de tres pozos, de los cuales el pozo Labay- 1 fue terminado en marzo de 2010 y para 2011 se tiene un programa de perforación de seis pozos, uno de los cuales está en el proyecto Área de Perdido, específicamente Maximino.
La cuenca del Golfo de México bajo tirantes de agua de 500 metros cubre una superficie aproximada de 575 mil kilómetros cuadrados. En esta cuenca se han identificado nueve provincias geológicas distribuidas en tres proyectos exploratorios: Golfo de México B, Golfo de México Sur y Área de Perdido.
Cinco áreas de exploración
En un diagnóstico de la Secretaría de Energía (Sener), difundido por el Frente de Trabajadores de la Energía (FTE), se precisa que se han definido cinco áreas con dos enfoques para su exploración y desarrollo: Perdido, donde tentativamente hay un potencial de 8 mil millones de barriles de petróleo crudo equivalente (aceite y gas) y que se comparte con Estados Unidos en los límites transfronterizos; Lamprea y Lankahuasa Profundo, que aportarían otros 9 mil millones de barriles; Coatzacoalcos Profundo, con 10 mil, y Campeche Profundo con 2 mil 400 millones de barriles de crudo.
Sin dar una explicación técnica, según la Sener, México elevaría la producción de crudo en aguas profundas del punto en que se inicia la producción (2011) a 2015 en 371 mil barriles diarios en promedio. La producción de gas pasaría de cero a 416 millones de pies cúbicos diarios en promedio.
Sin embargo, Carlos Morales precisó que el costo de perforación por pozo es de unos 100 millones de dólares y que en caso de que se encuentre petróleo crudo en alguno de los pozos exploratorios en aguas profundas del Golfo de México la producción se puede dar en un lapso futuro de entre tres y cuatro años.