Laboristas, conservadores y liberaldemócratas buscan el sufragio de 20% de indecisos
No se prevé mayoría absoluta para nadie en un país poco acostumbrado a las coaliciones de gobierno
Jueves 6 de mayo de 2010, p. 26
Londres, 5 de mayo. En lo que serán este jueves las elecciones más disputadas en los últimos 30 años en Inglaterra, los sondeos de opinión dieron hoy un giro al poner a la cabeza al gobernante Partido Laborista (PL). Sin embargo, la lucha por el poder entre laboristas y conservadores tories tenía como variables dos elementos: los indecisos, que forman cerca de 20 por ciento de los electores que aseguran que votarán mañana, y la influencia que haya logrado acumular el Partido Demócrata Liberal bajo la tutela de su líder, Nick Clegg.
El Partido Laborista, el cual encabeza el primer ministro británico, Gordon Brown, está a la cabeza según un sondeo difundido miércoles, el último día de campaña. Tres periódicos nacionales manifestaron su apoyo a partidos de oposición.
Un sondeo de YouGov para el diario The Sun sugirió que el avance de los conservadores de centroderecha se detuvo, y les dio 35 por ciento de la intención de voto, mientras que los laboristas de centroizquierda subieron hasta 30 por ciento, apenas ocho días después del incidente protagonizado por Brown y la electora laborista, Gillian Duffy, que los medios pronosticaron sería la ruina de los laboristas. El primer ministro habló con la mujer y al subir a su vehículo, aún con el micrófono abierto que llevaba en la solapa de su traje, tachó a Duffy de intolerante
.
Los liberaldemócratas que han disfrutado de un fuerte aumento en la intención de voto, cayeron 4 puntos y obtuvieron 24 por ciento en la encuesta. Clegg, su líder, ha señalado que si su partido llega a ser el fiel de la balanza para decidir la formación del Parlamento, él no consideraría ético que su partido intervenga en la elección del futuro primer ministro.
Las peculiaridades del sistema electoral británico, en que los votantes eligen a un miembro del Parlamento de su circunscripción política, supone que esas cifras permitirían que los laboristas sigan siendo la más grande agrupación parlamentaria, pero sin mayoría.
Un sondeo de ComRes para el diario The Independent no mostró cambios y dejó a los conservadores con 8 puntos de ventaja sobre los laboristas, lo que daría al partido opositor la mayoría en el parlamento de 650 escaños, aunque no sería absoluta.
Se trata de las elecciones británicas más disputadas desde 1974, y el país no está acostumbrado a la formación de coaliciones, algo frecuente en muchos países europeos.
Daily Express y Daily Mail manifestaron su apoyo al conservador Cameron y The Independent, en cambio, se mostró a favor de los liberaldemócratas.
El diario liberal analizó los posibles escenarios que pueden arrojar como resultado estas elecciones. Uno es que Cameron gane con mayoría de conservadores en el parlamento, o bien, que queden estrechamente por debajo de los laboristas, en cuyo caso la elección de jefe de gobierno se complicará. Lo mismo ocurrirá en el tercer escenario planteado por The Independent, en que los tories tendrán escasa mayoría de votos y escaños, con los laboristas en segundo lugar y los liberaldemócratas en tercer sitio, como los ganadores verdaderos de la jornada, en posición de haberse convertido en una fuerza política determinante en el panorama político del país.
Con los actuales resultados de las encuestas, también es posible que los tories obtengan la mayoría de los escaños y no es imposible que los liberaldemócratas queden por encima del laborismo, en lo que representaría un masivo voto de castigo contra el PL.
Otro resultado factible es que el partido ganador en la elecciones, ya sea el conservador o el laborista, no tenga mayoría de escaños en el Parlamento, o bien, que los laboristas ganen el voto popular, pero queden en minoría en, una vez que los tories y los liberales se hagan de la mayoría de las bancadas.
De resultar un gobierno en que la mayoría y el apoyo popular estén en una posición de debilidad, podría beneficiar negociaciones con los liberaldemócratas que proponen una reforma electoral a fondo que incluiría un referendo para replantear la representatividad de varios puestos de gabinete y escaños parlamentarios, con la intención de contener el gasto público y volver más eficiente el gobierno.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, afirmó este miércoles a diputados de su mayoría gobernante que si el conservador antieuropeo, Cameron, se impone en las reñidas elecciones generales en Gran Bretaña terminará siendo proeuropeo, como los otros
.
Sarkozy hizo ese comentario a diputados de la Unión por un Movimiento Popular (UMP, derecha), con los que se reunió el miércoles a puertas cerradas en el Elíseo, sede de la presidencia.
Al referirse a la crisis griega que sacude al euro, Sarkozy declaró que el actual primer ministro británico, Gordon Brown, fue un gran apoyo
, pese a que su país no integra la eurozona (16 países), indicaron los invitados a la reunión.