La Habana, 3 de mayo. El ministro del Transporte y vicepresidente del Consejo de Ministros, Jorge Luis Sierra Cruz, fue destituido por errores cometidos en el desempeño de sus funciones y será remplazado por dos militares en esos cargos, informó esta noche la televisión.

De 49 años e ingeniero mecánico de profesión, Sierra es el más joven de los integrantes del Buró Político del Partido Comunista de Cuba, la cúpula del liderazgo nacional.

El telediario informó que también fue destituido como ministro del Azúcar Luis Manuel Ávila González, ingeniero agrónomo de 59 años, después de que solicitó su liberación, al reconocer las deficiencias de su trabajo, que le fueron señaladas.

La nota oficial indicó que a los dos destituidos les serán asignadas otras tareas, pero no quedó claro si Sierra conservará su asiento en el Buró Político.

Apenas el viernes pasado Sierra presidió en La Habana la entrega de un remolcador fabricado en un astillero cubano, y destinado a Petróleos de Venezuela.

El general de división Antonio Enrique Lussón Batlle, miembro del Comité Central del PCC, quien estaba a cargo de la rehabilitación de los ferrocarriles, ocupará la vicepresidencia vacante. El director general de una empresa de transporte de alimentos, también militar (de rango no especificado), César Ignacio Arocha Masid, será el nuevo ministro del Transporte y en la cartera del Azúcar fue designado el ingeniero químico Celso García Ramírez, quien era el viceministro primero de esa cartera y es un profesional de la industria.

Sierra había realizado la típica carrera política, ascendiendo posiciones desde líder estudiantil en el bachillerato hasta jefe regional del PCC en la provincia oriental de Holguín, de donde pasó al Buró Político. Bajo el gobierno de Raúl Castro, fue promovido a su cargo ministerial y a la vicepresidencia.

Al frente del Ministerio de Transporte, Sierra tuvo que gestionar la rehabilitación del sector, que resultó fuertemente golpeado tras la crisis de la década pasada. En la nueva etapa el ministro contaba con el impulso de suministros y créditos de socios cercanos de la isla, como China, Rusia e Irán.

Ávila, que había hecho toda su carrera en la industria azucarera y llegó a dirigir el ministerio en noviembre de 2008, también se enfrentaba a una rama que entró en declive a mediados de los noventa, redujo sus dimensiones a cerca de la mitad a principios de esta década y no ha podido levantar cabeza.

En 2010 Cuba produjo cerca de 1.3 millones de toneladas de azúcar, seis veces menos que en su etapa de prosperidad, hace tres décadas. La isla consume unas 700 mil toneladas del dulce al año y exporta 400 mil a China.