Chilpancingo, Gro., 29 de abril. Organizaciones sociales se solidarizaron con el Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Parota (CECOP) y rechazaron el acuerdo que se tomó el miércoles en la comunidad La Concepción, municipio de Acapulco, donde unos 600 comuneros vigilados por cientos de policías aprobaron en asamblea la construcción de la presa sin la presencia de miembros del CECOP.

Nicolás Chávez Adame, dirigente de la Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero, anunció que para elaborar un plan contra la construcción del embalse, el próximo sábado se efectuará una reunión urgente en la Normal de Ayotzinapa –ubicada en el municipio de Tixtla, a 14 kilómetros de Chilpancingo–, después de la marcha del primero de mayo.

Indicó que las organizaciones sociales de Guerrero coinciden en que es necesario redoblar el apoyo al CECOP. Al mandar policías a resguardar la asamblea, el gobernador Zeferino Torreblanca Galindo está demostrando que optará por la represión del movimiento, pero desde aquí le decimos que vamos a defender las tierras de los bienes comunales de Cacahuatepec, junto con los compañeros del CECOP, afirmó.

Adelantó que la consigna central de las organizaciones sociales en la marcha del primero de mayo será en defensa de los ejidatarios aglutinados en el CECOP.

Arturo Miranda Ramírez, dirigente de la Asociación Cívica Nacional Revolucionaria, calificó de burda maniobra del gobernador la presunta aprobación el proyecto de la presa La Parota, porque demuestra que no le interesa el daño al entorno ecológico, y mucho menos el futuro de miles de indígenas campesinos que perderían sus tierras.

Miranda Ramírez pidió al CECOP que no le crea un ápice al gobierno de Torreblanca. Recordó que los pueblos que a principios de la década de 1980 aceptaron la construcción de la presa El Caracol, a orillas del río Balsas, lo perdieron todo. Más de 5 mil personas de los municipios de Cutzamala, Cocula y Zumpango se quedaron sin las buenas tierras que les daban de comer. Perdieron sus animales, su historia, sus panteones, y no les dieron nada, la ayuda nunca llegó. Más de 80 por ciento tuvieron que emigrar.

El presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso de Guerrero, Héctor Vicario Castrejón, dijo estar en favor de La Parota: Creo que será el proyecto del siglo para Guerrero. Se debe hacer una evaluación serena y los funcionarios deben tener suficiente capacidad política e inteligencia para convencer de sus bondades, no atropellar el interés ni los derechos de los habitantes de la región. Debe haber alternativas; sin embargo, el legislador priísta reconoció: No tenemos información del lugar en que se reubicaría a los afectados.