Guadalajara, 26 de abril. Por instrucciones de la Conmebol, ya no se permiten refuerzos, dijo el directivo de Chivas, Rafael Lebrija, al aclarar que no le queda más remedio que echar mano de sus canteranos para afrontar desde este martes la Copa Libertadores, con el partido de octavos de final ante el Vélez Sarsfield argentino, en el estadio Jalisco.

El otro equipo mexicano que tendrá actividad en el certamen sudamericano es el San Luis, que hará los honores al también argentino Estudiantes de La Plata. El cuadro potosino no tiene doble cartelera, como Chivas, que también está en la liguilla, mientras que Morelia, Monterrey y Estudiantes no sobrevivieron a las primeras etapas.

Tanto rojiblancos como Gladiadores accedieron directamente a los octavos de final, tras haber sido excluidos en la edición pasada debido a la epidemia de influenza. En esta fase de la Libertadores predominan los equipos brasileños, con cinco representantes, seguidos por los argentinos, que son tres.

Chivas sufre la baja de cinco jugadores convocados a la selección, más algunos lesionados; no obstante, Lebrija dijo que recurrirán a nuestra gente que tenemos registrada en diferentes divisiones, nos alcanza y vamos con todo.

Los tapatíos tienen una defensa frágil. Héctor Reynoso está suspendido luego de aventarle residuos nasales a Sebastián Penco hace un año; Aarón Galindo y Juan Ocampo están lesionados, mientras que Jonny Magallón está con el Tri, su máxima fortaleza ha sido el portero Liborio Sánchez. La esperanza al frente se cifra en Omar Arellano y Omar Bravo.

En contraparte, Vélez guardó lo mejor para esta visita, porque el Rebaño siempre se las ha ingeniado para dar batalla a los argentinos. Chivas es un rival complicado, admitió el técnico de Vélez, Ricardo Gareca. A pesar de que no tiene mucha experiencia en sta competencia, siempre es un adversario respetable y Vélez lo va a encarar como tal, añadió.

En tanto, el cuadro que dirige Ignacio Ambriz parece tener una mejor perspectiva, pues en una decisión arriesgada, Estudiantes afrontará el partido de ida sin seis titulares, entre ellos el capitán Juan Sebastián Verón y el artillero Mauro Boselli, ya que en estos momentos da prioridad al torneo Clausura argentino, en el que marcha líder a falta de tres fechas para el final.

Para los Gladiadores, que no sufrieron bajas por convocatorias a la selección, se tratará de una oportunidad de resarcir la eliminación en el torneo local.

Las revanchas se jugarán la próxima semana y en caso de que tres o más equipos de un mismo país sigan en carrera, deberán eliminarse entre sí en cuartos de final. Luego, debido al Mundial, la Libertadores se suspenderá y se reanudará el 28 de julio.