Ciudad Juárez, Chih., 25 de abril. Con las tribunas colmadas y un triunfo de 2-0 sobre Pumas, Indios se despidió de la primera división, mientras los auriazules, pese a recibir dos anotaciones, lograron imponer un récord defensivo en torneos cortos, al recibir sólo 10 goles en 17 partidos.

En 1996 Atlante había establecido la marca de 11 recibidos y en 2006 el mismo Pumas registró una cifra idéntica.

La Tribu, que ascendió al máximo circuito en 2008, pero esta temporada sólo sumó 15 puntos, festejó con su afición la última jornada del torneo Bicentenario con la victoria y un doblete del uruguayo Héctor Giménez.

Miles de seguidores del cuadro fronterizo se dieron cita en el estadio Olímpico Benito Juárez para despedir a su equipo, que jugará el próximo torneo en la Liga de Ascenso. Y aunque la elevada concurrencia al inmueble fue una constante en los recientes dos años, sorprendió la festividad del público.

En la cancha, el equipo de Ciudad Juárez respondió con entrega y con la visible intención de salir de la primera división con dignidad, ante un Pumas que buscaba el tercer puesto de la tabla general de cara a la liguilla.

Al minuto 16, Giménez aprovechó un centro para romper el fuera de lugar. Quedó solo ante el arquero y disparó potente por abajo, pero Bernal alcanzó a meter la mano para desviar a tiro de esquina. En esa acción, el guardameta salió y se quedó a medio camino, mientras el balón llegó al segundo poste, donde, el uruguayo naturalizado mexicano conectó de cabeza, para el 1-0.

Poco después, al 27, otra vez Giménez bajó la pelota con el pecho, dio media vuelta y con pierna derecha derrotó a Bernal, quien se encontraba adelantado, para marcar un golazo y decretar el 2-0 .

Si bien Indios ya no consiguió más anotaciones en los siguientes minutos, logró mostrar una buena imagen y desdibujar al conjunto de la UNAM, con muchos problemas defensivos y sin conexión de líneas.

Durante el segundo tiempo Pumas tuvo mayor control y llevó el juego al territorio del local, pero su mejor acción de peligro llegó hasta el 79, en un disparo de Leandro Augusto a balón parado que se estrelló en el poste izquierdo.

Con el silbatazo final del árbitro Jorge Eduardo Gasso hubo algunos rostros de tristeza, pero fueron pocos ante los miles que ovacionaron a Indios con muchas muestras de apoyo.

Mi amor por Indios no desciende, No es adiós sino hasta luego y Volveremos, fueron algunas de las frases más utilizadas en cientos de carteles de la afición, mientras otros levantaban sus brazos con dedos haciendo la señal de la victoria.

Pumas, que había llegado a Ciudad Juárez con sólo ocho goles en contra, sumó 10 en su cuenta de recibidos, por 20 anotados, y quedó en el cuarto lugar de la tabla general de la fase regular, con 28 puntos, luego de tres derrotas, siete empates y siete victorias.