El ex presidente de Estados Unidos William Clinton recomendó a los gobiernos de Felipe Calderón y Barack Obama la creación de un plan México, similar al de Colombia, para combatir el narcotráfico, pero resaltó que debe ser elaborado por los mexicanos para evitar suspicacias de intervencionismo.

Al participar en un acto por el 50 aniversario de la Universidad del Valle de México (UVM), reveló que en su reciente visita al país, la secretaria de Estado Hillary Clinton pidió a los funcionarios con los que se reunió instaurar un proyecto de esa naturaleza, y agregó que el tema ya ha sido analizado con integrantes de la Cámara de Representantes.

En conferencia magistral se refirió al terrible precio que se está pagando en la lucha contra el narcotráfico, y aprovechó para manifestar su admiración al presidente Felipe Calderón, porque sabemos que es un problema casi sin solución. No obstante, estamos tratando de enfrentarlo y nosotros tenemos que darles más ayuda, enfatizó.

Refirió que no existe manera de que México por sí solo resuelva el problema ni hay forma de que Estados Unidos se proteja solo. Es algo que tenemos que trabajar juntos, insistió.

Sin mencionarlo, William Clinton aludió al debate migratorio que se realiza en Arizona, así como a la violencia en México.

Recordó que de Texas a California a la mayoría de estadunidenses nunca les importó si entraban mexicanos, documentados o indocumentados, porque eramos amigos, compartíamos una existencia, se necesitaba trabajar y se necesitaba ayudar a la gente. Pero ahora muchos se empiezan a sentir inseguros, agregó.

Lo único que les puedo decir sobre esto es que no todos los problemas se van a solucionar de manera perfecta.

El ex presidente de Estados Unidos habló ante un auditorio formado por estudiantes, académicos y miembros del cuerpo diplomático acreditado en México, entre ellos el embajador Carlos Pascual.

En un amplio salón del campus Coyoacán de la UVM, lo mismo se refirió a las características del mundo actual –que a su consideración son la interdependencia, la desigualdad social y el cambio climático– que a la problemática de Haití y a que su novela favorita es Cien años de soledad, del colombiano Gabriel García Márquez.

Durante la sesión de preguntas y respuestas se le pidió opinar sobre la posibilidad de crear mayores mecanismos de cooperación y construir un plan México. El ex mandatario respondió que a él sí le gustaría ver un proyecto en ese sentido.

Pero tiene que ser un plan conjunto, porque Estados Unidos invadió México en más de una ocasión, y las consecuencias nos permitieron tener mucho territorio en nuestro país y que al mismo tiempo se generara entre los mexicanos un feroz sentido de independencia.

Si se concreta ese proyecto, tiene que ser un plan de México en el que nosotros estemos de acuerdo en que debemos participar, para que no haya ningún ciudadano mexicano que piense que nosotros estamos interviniendo en sus asuntos o tratando de determinar el futuro de su país, añadió.

Recién llegado de Acapulco, donde participó en la convención de los banqueros, Clinton agregó que ese plan no puede estar concentrado completamente en el éxito de la confrontación militar.

Tampoco estoy en contra de ello, aclaró. Creo que (los narcotraficantes) son personas terribles; organizan a los terroristas, a los criminales y matan a civiles. Esto no me gusta, pero lo que he observado es que virtualmente es imposible en cualquier parte del mundo que acabemos con todos los enemigos. Esto es algo dificilísimo de hacer.

Propuso un plan integral que vaya más allá de la ayuda a México para que se defienda mejor. Pero insistió en que debe ser elaborado por los mexicanos.

La secretaria de Estado ama a este país, pero también entiende la política y no quiere ser vista como alguien que les esté diciendo a ustedes qué hacer. Esa no es nuestra postura. Nosotros tenemos que trabajar en conjunto con ustedes en un esfuerzo de asociación, subrayó.

Mencionó que una de las razones por las cuales se libra una batalla contra los narcotraficantes en la frontera sur de Estados Unidos es el éxito en el combate a los cárteles de Colombia. Como se les empezó a dificultar la vida allá, han caminado hacia el norte, añadió.

Estimó que debido a la interrupción de las rutas marítimas y aéreas, los traficantes de droga –que ganan mucho dinero– decidieron que lo más fácil de hacer era tratar de obtener las rutas terrestres y asesinar a los funcionarios de seguridad, por lo cual estamos pagando un precio terrible.

Por último, a la pregunta de una alumna, contestó que llegó a ser presidente de Estados Unidos por su interés en la política, porque creció sin televisión, nunca dedicó tiempo a Internet, aprendió a escuchar las historias de las personas y desarrolló la habilidad de hacer más de una cosa a la vez y trabajar muy duro.