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Ver día anteriorDomingo 25 de abril de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
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¿La Fiesta en Paz?

Emprezafios y empresarios

A

diferencia del empresario profesional, a los emprezafios los caracteriza su falta de sensibilidad y de tacto, así como de conocimientos para llevar a buen puerto la empresa que pretenden conducir. Impreparados pero precipitados, carecen de perspectiva, por no decir de grandeza, y con una óptica estrecha de su misión empresarial se contentan con cubrir apariencias sin vislumbrar la trascendencia que debían imprimir a sus acciones.

Hace décadas los más adinerados de México decidieron apropiarse del espectáculo taurino no sólo haciendo uso de su libertad, sino aprovechando también el desinterés de autoridades y partidos políticos por el mismo y luego de comprobar que aficionados y público, al igual que los votantes, no cuentan y menos actúan, independientemente del espectáculo que se les ofrezca.

A falta de imaginación empresarial, a los emprezafios les sobra dinero, por lo que su última preocupación es profesionalizar su tarea y sustentarla en una visión de futuro con perspectiva histórico-cultural, en preservar con eficacia una tradición, y desde luego en buscar, encontrar y promover nuevos valores que susciten el interés de la afición y eventual apasionamiento de los públicos por determinados diestros nacionales.

Ante la ineptitud de estos multimillonarios –en dólares– de la revista Forbes metidos a falsos promotores, exitosos en todas sus empresas excepto en la de los toros, donde fracasan sin agobio, entusiastas empresarios con imaginación y taurinismo empiezan a multiplicarse.

El jueves 22 hubo un lleno en el Lienzo Charro del Pedregal en la primera novillada nocturna del serial Porque quiero ser torero, organizado por Pedro Haces hijo, en la que ante reses de Pepe Garfias triunfó el joven Mirafuentes de Anda y mostraron cualidades Manuel Sánchez Mejías, Manolo Serna y el rejoneador Eduardo Rubí.

Ayer en Iztacalco se llevó a cabo, con gran éxito artístico y de público, un festival gratuito en el Lienzo Charro de La Viga, con la participación de los matadores Humberto Flores, Édgar Palacios, Alberto Huerta, Abraham Ruiz, Jorge Delijorge y Juan Luis Silis, así como el novillero Rodrigo Ochoa, que lidiaron novillos de la ganadería tlaxcalteca de Coaxamaluca. Por cierto, Palacios y Silis son originarios de Iztacalco.

El jefe delegacional, Francisco Sánchez Cervantes, comentó que este tipo de festivales taurinos se realizan con la finalidad de ofrecer espectáculos de calidad y en forma gratuita a la comunidad. En efecto, la tarde fue amenizada además por la Banda Sinfónica Delegacional de Iztacalco y un ballet folklórico. Bienvenida entonces una fiesta de toros menos pretenciosa, pero más verdadera que la ofrecida por el duopolio de los millonarios.

Y para el próximo lunes 3 de mayo, feriado, a las 16 horas, la empresa Herald, que encabezan Luis González Alducin y el matador Marcial Herce, ofrecen un cartel de lujo con motivo de la feria de Tecamac, estado de México: toros del hierro hidalguense de Manuel Macías para los matadores Federico Pizarro, una de las ausencias injustificadas de la reciente temporada grande en la Plaza México, y Marcial Herce, uno de los buenos toreros desperdiciados por el sistema taurino mexicano.

La empresa Herald, además de cobrar precios accesibles para este festejo –150 pesos por persona y niños 2x1–, anuncia que el poseedor de cada boleto tendrá derecho a participar en la rifa de dos pantallas LCD de 32 pulgadas. Atractivos varios a partir de un amor sin adjetivos por la fiesta y de una clara filosofía de servicio.