Monterrey, NL, 21 de abril. El alcalde panista de San Pedro Garza García, Mauricio Fernández, anunció la desaparición del llamado Grupo Rudo, creado para terminar por la buena o por la mala con ejecuciones, secuestros y extorsiones de la delincuencia organizada.

El edil sostuvo que la disolución del grupo no se debió a la detención de Alberto Mendoza, El Chico Malo, el 19 de marzo pasado durante un operativo de la Secretaría de Marina, sino por los altos costos que implicaba mantener a los rudos y porque ya cumplió con el objetivo de limpiar San Pedro. Consideró que se confundía el trabajo del grupo y se desvirtuaban sus objetivos.

Tampoco, dijo, influyeron las opiniones del gobierno federal que, por conducto del secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, negó estar informado de la contratación de El Chico Malo, como dejó entrever Fernández Garza el 28 de marzo anterior, aunque luego ofreció una disculpa por el malentendido.

El alcalde tenía a Mendoza a sueldo como parte de su equipo de informantes. Al presentar detenido a El Chico Malo, Marina le imputó ser jefe del cártel de los Beltrán Leyva en San Pedro, trabajar para otras organizaciones criminales y operar un equipo de espionaje contra políticos y empresarios.

En tanto, siete personas murieron entre martes y miércoles en la entidad por presuntos ajustes de cuentas entre la delincuencia organizada, entre ellas un policía municipal de General Bravo, que fue incinerado en su domicilio.

La noche del miércoles se documentaron en diversos puntos de Nuevi León cuatro balaceras que dejaron tres muertos y tres heridos. En la colonia Carmen Romano, de San Nicolás, murieron dos personas y una resultó lesionada, cuando las atacaron mientras laboraban pintando un vehículo; en la colonia Cañada Blanca, de Guadalupe, un menor fue acribillado; en Lomas del Pedregal, en Apodaca, hubo dos heridos, y en la colonia Florida, de Monterrey, se localizó una camioneta baleada.

En el municipio de Santiago se halló el cadáver de un hombre con un balazo en la cabeza. Dos días antes, Los Zetas abandonaron en San Pedro el cuerpo de un oficial de tránsito. En otros puntos se reportaron cuatro muertes más