Monterrey, NL, 20 de abril. El embajador de Estados Unidos en México, Carlos Pascual, aseguró que la información más importante para combatir al crimen organizado en las zonas donde la población ha recuperado la confianza en las autoridades, no ha provenido de los sistemas de inteligencia de ninguno de los dos países, sino de la sociedad mexicana, como ocurre en la ciudad de Tijuana, Baja California.

Señaló que los esfuerzos conjuntos de México y Estados Unidos, como parte de la Iniciativa Mérida, han arrojado valiosos resultados que se reflejan en la detención de importantes capos de mediados de 2009 a la fecha.

Hizo referencia a la captura de Arturo y Carlos Beltrán Leyva, Eduardo Teodoro García Simental y 103 integrantes de La Familia Michoacana, así como de cientos de miembros del cártel de Sinaloa y el congelamiento de cuentas de la organización delictiva llamada del Golfo.

Pascual explicó que Estados Unidos ha dado capacitación a más de 5 mil 500 policías federales mexicanos, y ahora se analiza cómo seguir ese modelo a escalas estatal y municipal.

Agregó que también se avanza en la capacitación de jueces, procuradores y estudiantes que ingresarán al Poder Judicial, con el propósito de instrumentar un nuevo sistema de justicia a partir de la reforma legislativa de 2008 aprobada por el Congreso.

Aclaró que la Iniciativa Mérida no es una solución para el problema del narcotráfico, sino una instancia con capacidad para combatir un fenómeno que se seguirá reinventando de manera creativa.

Al presidir la 37 asamblea anual de la Cámara Americana de Comercio, capítulo Monterrey, Carlos Pascual afirmó: “tenemos que atacar los sistemas financieros de los cárteles para evitar que puedan seguir operando en organismos y bancos, con el lavado de dinero, y en las donaciones”.

Expuso que es preocupante la forma en que la violencia y la inestabilidad han incrementado el costo de realizar negocios, y muchas empresas identifican la falta de condenas del sistema de justicia como un problema clave, porque las organizaciones criminales pueden actuar con impunidad.

El embajador estadunidense agregó que por esa razón la violencia y la inestabilidad pueden provocar que las corporaciones reconsideren sus estrategias para ubicarse en México.

No obstante, señaló que no sabe de una sola empresa que se haya ido de México por el problema de la inseguridad.

El presidente nacional de la Cámara Americana de Comercio, José Zozaya, explicó que sólo los 2 mil socios del organismo invertirán este año en México 2 mil 500 millones de dólares.

Refirió que los socios representan cerca de 70 por ciento de la inversión extranjera y generan en forma directa o indirecta 30 por ciento de los empleos totales del país.

Ante unos 300 socios de la Cámara Americana de Comercio, Carlos Pascual comentó que el Ejército Mexicano ha tenido y puede desempeñar un papel muy importante en la lucha contra el narcotráfico.

Resaltó el caso de Tijuana, Baja California, donde se ha coordinado de manera estrecha y eficiente con la policía municipal y el Ministerio Público, logrando reducir los niveles de violencia.

Por eso, dijo, la inteligencia, la información más efectiva y actual que han tenido las fuerzas de seguridad de Tijuana no ha venido de los sistemas de inteligencia de México ni de Estados Unidos, sino de la población, porque es la gente la que está viviendo entre los narcotraficantes.

Ése es el modelo que podemos ver que sí puede tener impacto para reducir la violencia del crimen organizado, enfatizó.