Consciente de su realidad, el mediocampista Pável Pardo señaló ayer que el América necesita vencer al Santos y esperar un milagro para clasificar a la liguilla del torneo Bicentenario.

La situación en la que llegan a la última fecha es complicada, porque dependen de otros resultados, pero Pardo recordó que los milagros a veces se dan, únicamente hay que tener fe.

Al arrancar la conferencia de prensa con el mediocampista en las instalaciones del club, señaló que para el fin de semana hay que sacar todo: goles, calculadora, veladoras, todo, para alcanzar su objetivo.

Como el pasado no lo podemos componer, lo único que les queda es luchar hasta el final; ganar y esperar los demás resultados de la jornada.

Confesó que es triste la situación por la que están pasando y los únicos responsables somos nosotros, los jugadores, y el cuerpo técnico. Los dirigentes no lo sé, pero los demás sí, ya que son los que entran a la cancha.

Ahora, recordó, en el futbol todo puede pasar, y cuando menos lo piensas suceden las cosas. Reiteró que el balompié nacional fomenta la mediocridad, porque cualquiera de los que entran a la liguilla puede ser campeón, no importa si se clasificó en primer lugar o en el último.

No hay ninguna duda de que el América ha sido un equipo irregular, aceptó Pardo; sin embargo, rechazó que falte hambre de triunfo o que tengan problemas con su condición física.

Salvo el segundo tiempo del pasado encuentro con el Monterrey, según él, en los otros compromisos han estado bien; el equipo no se ha caído. No creo que pase por el tema físico, insistió, sino por las desatenciones: Los errores individuales nos están costando puntos y partidos.

Pardo puntualizó, también, que puedes correr y correr, pero si no lo haces inteligentemente, de nada sirve. El futbol se juega con los pies, con inteligencia y con el corazón, es cierto, pero no es que falte hambre. Corremos, luchamos, pero falta atención, inteligencia y orden táctico.

Cuestionado sobre cuál era la solución para que el América camine, cuando han cambiado hasta de directiva, respondió: Buena pregunta. Creo que son muchos factores, y reiteró que los responsables somos nosotros, por lo que deben hacer un análisis de lo que han hecho. Aunque terminó diciendo que no es mago ni el técnico o dueño del equipo para saberlo.