Jóvenes somalíes desde el exilio usan la música para dar un mensaje contra el terrorismo
Soy musulmana, reivindica una de las integrantes del grupo que usa jeans en los conciertos
Sus canciones causan el enojo de algunos grupos; el fundador de la banda sufrió un atentado
Domingo 18 de abril de 2010, p. 9
Nairobi, 17 de abril. Durante siglos, los somalíes usaron poesías y canciones para transmitir mensajes de protesta a sus poderosos gobernantes, a quienes les tenían demasiado miedo como para confrontarlos directamente.
Ahora, algunos jóvenes somalíes están usando el rap para expresarse contra los islámicos radicales, que según dicen están usando la religión para librar una guerra en su país.
La banda Waayaha Cusub, de 11 integrantes, actualmente exiliada en la vecina Kenia, quiere que sus letras de rap alienten a sus pares somalíes a que se pongan de pie frente a los rebeldes islámicos conocidos como al-Shabaab.
Han entregado al menos 7 mil copias gratuitas de su recién editado disco No To Al Shabaab entre los residentes del barrio Eastleigh, de Nairobi, hogar de muchos inmigrantes somalíes.
Acabaremos con el temor que le impide a nuestra gente hablar en contra de al-Shabaab. Le mostraremos a nuestro pueblo que podemos hacerles frente
, dijo Shine Abdullahi, fundador del grupo.
Al-Shabaab ha sitiado al gobierno de Mogadiscio, respaldado por Occidente, y controla gran parte de sus sectores rurales.
Estados Unidos dice que es el representante de Al Qaeda en el este de África.
A los rebeldes se les han unido militantes extranjeros, que según las agencias de seguridad de Occidente usan el país como un refugio para tramar ataques en la región y otras zonas.
“Ellos hablan de una guerra santa, están entrenando y confundiendo a la juventud, y queremos detener la difusión de esas ideas y advertir a nuestro pueblo que no hay jihad (guerra santa)”, dijo Abdullahi, de 27 años.
El nuevo disco atrajo más de 100 mil visitas al sitio Web del grupo, www.waayahacusub.com, en las primeras tres semanas. Abdullahi dice que desde entonces ha sido intervenido, posiblemente por al-Shabaab.
Ellos son crueles, enseñan terrorismo, enceguecen y causan dolor, inyectan drogas que conducen a la acción, los fuerzan a matar a sus padres y parientes
, dice unos de los raps del grupo.
La única mujer del grupo, Falis Abdi Mohamud, es una rebelde por derecho propio. En un video, la joven de 23 años no aparece con la cabeza cubierta como la mayoría de las mujeres somalíes, y sólo usa jeans ajustados.
“Me critican y dicen ‘ella no es musulmana porque está usando pantalones’. Yo soy musulmana. Quiero llegar a mi pueblo. No detendré mi misión por los temores de otras personas o por los deseos de otras personas. La historia dirá quién está en lo correcto y quién se equivocó”, comentó.
Mohamud nació en la ciudad sureña de Kismayo, que ahora es un bastión de al-Shabaab. Los insurgentes han prohibido la música en las zonas que controlan y sólo permiten cantos coránicos.
Waayaha Cusub estuvo de gira por la región semi autónoma de Puntland en julio, pero Mahmoud espera algún día poder presentarse en su ciudad natal.
El viaje a Somalia fue genial. Entonces fue que me di cuenta de que a la gente le gusta nuestra música, y eso realmente nos dio confianza para no detener nuestra lucha porque haya unas pocas personas a las que no les gustamos
, declaró Mahmoud.
Represalias
El integrante más joven del grupo es Suleqa Mohamed, de 15 años, quien estudia en una escuela de Eastleigh.
La mayoría quiere regresar a Somalia y vivir de su música cuando retorne la paz, pero ahora sobreviven gracias a los auspicios de empresarios y somalíes exiliados.
Sus canciones han enfadado a algunas personas. Han sido atacados incluso en la relativa estabilidad y seguridad de Kenia. Hombres armados dispararon e hirieron a Abdullahi en 2007.
El ataque fue porque el grupo editó una serie de canciones criticando la incursión de Etiopía en Somalia y los atentados suicidas por parte de los insurgentes.
Ni siquiera los mensajes de texto vía teléfono celular de simpatizantes de al-Shabaab en Kenia y Somalia han logrado intimidar a Abdullahi.
Dice que nunca se sentirá acobardado por quienes denomina caudillos religiosos
que ofrecen al mundo una horrible imagen del Islam.
El ataque estuvo dirigido a silenciar al grupo, pero eso no funcionó
, sostuvo, mostrando las cicatrices en su estómago producto de una bala y la subsiguiente cirugía.
No permitiremos que nadie nos calle. Ellos malinterpretan nuestra religión y matan personas. Están malditos
, señaló.
No pueden ganar
Es un momento difícil para ganarse los corazones de los adolescentes, que fácilmente confunden su religión con la ideología divulgada por grupos como al-Shabaab y Al Qaeda, indicó Abdullahi. Sin embargo, muestra más optimismo en cuanto a la posibilidad de ganar su parte de la guerra, librando a Somalia de al-Shabaab.
Esta es una verdadera guerra. Quienes se niegan a honrar al profeta no pueden ganar. Nos impondremos a la larga
, concluyó.