De manera conjunta, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), la Procuraduría General de la República (PGR) y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), dieron a conocer que 691 piezas de las mil 29 que componen la llamada Colección Patterson son originales, y pertenecen a diversas culturas pehispánicas de México.

Las dependencia federales señalaron que especialistas nacionales realizaron un análisis de los objetos arqueológicos y detectaron que 252 son falsos, de reciente manufactura y ajenos al patrimonio mexicano.

En el llamado caso Patterson, las autoridades mexicanas buscan recuperar el patrimonio sustraído y que actualmente se encuentra asegurado por autoridades alemanas.

El INAH, la PGR y la SRE informaron que los expertos del instituto corroboraron la existencia de piezas falsas, las cuales muestran evidencias del uso de máquinas y herramientas modernas en su manufactura.

Entre los objetos copiados fueron detectados algunos de gran formato, como una cabeza olmeca y un Chac Mool, así como relieves en estuco, estelas, mascarones, jambas, frisos y dinteles de apariencia maya, y fragmentos de un mural que reproduce el estilo mixteco.

El litigio, que suma ya 12 años respecto de las piezas prehispánicas, continuará hasta que un tribunal alemán determine el siguiente paso. Debido al proceso abierto que se realiza en Baviera, no se puede dar mayor información con el objeto de no obstruir los procedimientos legales, dijo Julio Castrejón, vocero del INAH.

De la colección mesoamericana que fue asegurada en Alemania, en la cual figuran piezas de diversas civilizaciones, México se encuentra en vías de recuperar esos bienes culturales ilícitamente sustraídos del territorio nacional, los cuales pertenecen a la colección de Leonardo Patterson.

Hace unas semanas, expertos del INAH viajaron a la ciudad de Munich, donde permanecen resguardados los vestigios prehispánicos, y tras la evaluación con base en un riguroso análisis, se determinó que 252 piezas de un total de mil 29 son falsas.

Además, 86 objetos precolombinos más que fueron analizados no pertenecen a Mesoamérica y, por tanto, también resultan ajenos al patrimonio de México.

691 vestigios pertenecen al país

Las dependencias sostienen que en total pertenecen a México 691 piezas prehispánicas, las cuales provienen del actual territorio nacional. Resaltan figuras antropomorfas y zoomorfas en barro, basalto y piedra caliza; ollas, urnas y vasos de barro, algunos con policromía; figurillas diversas, puntas de proyectil, cuchillos y navajas de obsidiana y pedernal.

Vasija con rostro de jaguar, todas estas figuran entre las piezas prehispánicas falsas, según expertos, incluidas en la llamada colección PattersonFoto Cortesía del INAH

Además, hay braseros e incensarios, ornamentos de obsidiana, una máscara tallada en roca metamórfica, sellos, sahumadores, cajetes, collares y sartales de piedra.

Julio Castrejón explicó que para el desarrollo de estas diligencias, los expertos del INAH recibieron apoyo de la SRE, por conducto de la embajada de México en Alemania y del consulado general en Francfurt, así como con la asistencia de la PGR, por conducto de su Agregaduría Legal para Europa.

De conformidad con la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, la SRE, la PGR y el INAH seguirán trabajando para recuperar este patrimonio, acudiendo para ello ante todas las instancias legales, y reiteran su compromiso de salvaguardar el patrimonio cultural de la nación.

Ese proceso (legal) abierto no tiene tiempos y aún no sabemos en qué fecha podría resolverse; ya llevamos así 12 años, agregó el vocero del INAH.

En 2008, María del Perpetuo Socorro Villarreal, coordinadora nacional de Asuntos Jurídicos del INAH, aseguró a este diario que el lote incautado en Alemania carecía de registros en México y de denuncias por robo, porque seguramente procede de excavaciones clandestinas.

La colección completa (máscaras, esculturas en cerámica, oro, joyas y piedras preciosas) se exhibió en Santiago de Compostela, España, en 1997.

Leonardo Patterson pretendió venderla al gobierno regional de Galicia por más de 145 millones de dólares, pero fue descubierto gracias a una experta en arte que alertó sobre la dudosa procedencia de las piezas y después de ello fue almacenada.

Ahí permaneció 11 años, hasta que en marzo de 2008 salieron de España más de mil figuras rumbo a Alemania, sin que autoridades judiciales ni la policía española pudieran evitarlo.

No obstante, en 2007 la Brigada del Patrimonio Histórico de la Policía Nacional de España solicitó a los países interesados –incluido México– realizar los trámites para reclamar las piezas.

Perú y Ecuador fueron los únicos que respondieron al llamado y solicitaron, mediante comisiones rogatorias, la restitución de varios vestigios. Al primero se le entregaron 234 objetos arqueológicos.

Con información de Ana Mónica Rodríguez